Continúa la conmoción en La Plata, luego de que un inspector municipal fuera atropellado y arrastrado durante tres cuadras por un automovilista que se negó a parar en un control. Según indicaron fuentes policiales el agente se encuentra internado en el hospital Italiano, con un grave cuadro de salud.
p class="embed-responsive embed-responsive-16by9" contenteditable="false">"Pudo ser estabilizado y está consciente. Los médicos le realizaron una tomografía y se constató que tenía fractura de cráneo. A su vez, presenta sangrado de oído y otros traumatismos", explicaron a este medio, y agregaron que "lo va a ver un cirujano y se espera que lo intervengan".
Como se informó anteriormente, el episodio ocurrió cerca de la 1 de este domingo cuando un hombre -a bordo de un Fiat Siena negro con vidrios polarizados no reglamentarios- ingresó a un corredor vallado por conos con inspectores. Fue un agente de la Guardia Urbana de Prevención (GUP) el que se ubicó delante suyo para posicionarlo junto a uno de sus compañeros, quien le iba a solicitar la documentación correspondiente.
Sin embargo, en ese momento el conductor decidió darse a la fuga, llevándose puesto al inspector que por fortuna logró agarrarse del capot. Frente a esta situación, las autoridades intentaron detener el vehículo, pero este escapó a toda velocidad con el municipal encima. Apenas llegó a la esquina, el automovilista dobló en sentido a diagonal 73 hasta calle 15, haciendo que el efectivo saliera despedido.
La víctima cayó al asfalto y se golpeó en reiteradas ocasiones, quedando tendida en el suelo en estado crítico. La Policía montó rápidamente un operativo cerrojo y alertó al SAME para asistirla ya que perdía mucha sangre y tenía golpes de gravedad en su cabeza.
A dos cuadras de allí, sobre calle 15 casi 46, un taxista comenzó a hacer luces y señas para alertar a los oficiales. Una vez allí, dieron con el vehículo del implicado que estaba estacionado a mitad de cuadra y sin ocupantes.
El taxista le dijo a los policías que vio cómo los acompañantes se bajaron y se fueron caminando a un kiosco de la cuadra a comprar agua. Al instante, lograron dar con ellos y los detuvieron ahí mismo.
Según testigos, al momento de la detención, el conductor dijo de manera tranquila y relajada: "Me faltaba un espejito y pensé que me iban a sacar el auto". Ambos ocupantes fueron trasladados de inmediato a la comisaría Primera, donde se determinó que quien conducía el vehículo era un joven de 20 años acompañado por una menor de 16, situación que agrava aún más la causa, que fue caratulada como "tentativa de homicidio agravado por el vínculo de una menor".
El agente fue trasladado al hospital Italiano donde se le detectó una fractura de cráneo y por el momento se encuentra estabilizado. Tanto su familia, compañeros y funcionarios se encuentran esperando los partes médicos y haciendo un seguimiento sobre su estado de salud. Fuente: 0221