Gustavo Alberto Kibe, ex funcionario del Registro de la Propiedad en La Plata, fue condenado a cuatro años de prisión efectiva e inhabilitación perpetua por estafa, incumplimiento de deberes públicos y falsificación ideológica de documentos. La sentencia, producto de un juicio abreviado, abarca cinco casos ocurridos entre 2016 y 2017 durante la gestión de María Eugenia Vidal.
La fiscal Victoria Huergo demostró que Kibe orquestaba una trama de fraude al fraguar poderes especiales y falsificar boletos de compra-venta. En el Registro de la Propiedad, inscribía estas transacciones fraudulentas, aprovechándose de su posición y abusando de la confianza depositada en él. La mayoría de los casos involucraban la apropiación indebida de propiedades en La Costa.
Las víctimas, verdaderos propietarios de tierras e inmuebles, declararon en la investigación penal, desentrañando la compleja red de falsos apoderados y la posible complicidad de una escribana pública. La causa, iniciada en 2017, llevó a la detención de Kibe en 2020, quien cumplirá su condena en arresto domiciliario.
Uno de los episodios más notorios fue el intento de desplazar a herederos legítimos en sucesiones judiciales en Mar del Plata y Balcarce. Kibe y una escribana falsificaron operaciones de compraventa, inscribiendo ilegalmente cuatro lotes en Santa Teresita. Las maniobras incluían timbrados fraudulentos y evasión fiscal por un perjuicio estimado de más de un millón de pesos.
La sentencia refleja el compromiso judicial en la lucha contra la corrupción, marcando un hito en la rendición de cuentas de funcionarios públicos involucrados en prácticas delictivas.
