Una dieta a base de carne cruda para perros se puso de moda en los últimos años y hasta le pusieron un nombre: la dieta BARF, cuyas siglas responden a Biologically Appropriate Raw Food. Sin embargo, esta tendencia dio mucho que hablar, ya que algunos profesionales la cuestionaron por la supuesta peligrosidad que implicaría para las mascotas el consumo de carne cruda y sus respectivas bacterias.

"No recomiendo el consumo de carne de pollo cruda por la salmonella", señaló, cuyo consumo también pone en riesgo la salud de los humanos. Sobre el consumo de carne de vaca cruda, el experto señaló que pueden registrarse cambios en la materia fecal del animal, pero no mayores inconvenientes más allá de eso. "Puede cambiar su materia fecal y volverse más oscura, pero no les produce diarrea", señaló.

Es que según destacan los veterinarios que recomiendan el consumo de carne cruda, el perro es un animal carnívoro y su dieta debe tener la carne como pilar fundamental, ya que los perros pueden procesar la carne cruda sin problema y sus organismos pueden asimilar sus nutrientes. Fuentes: lamovidaplatense.info e infocielo.com