Diabetes en niños y jóvenes, es esencial comprender las distintas manifestaciones de esta enfermedad crónica. La diabetes, que afecta a millones en todo el mundo, se presenta en dos formas principales: la tipo 1, que suele diagnosticarse en niños y jóvenes, y la tipo 2, más común en adultos y vinculada al peso corporal y la inactividad física.
El diagnóstico de la diabetes en la infancia puede ser abrumador, pero es crucial para los niños y sus familias contar con información y apoyo. La diabetes tipo 1, caracterizada por la producción insuficiente de insulina, requiere la administración diaria de esta hormona. En Argentina, 1 de cada 10 personas diagnosticadas con diabetes padece la tipo 1.
Los síntomas de la diabetes en niños y jóvenes incluyen sed excesiva, pérdida de peso repentina, micción frecuente, falta de energía y cansancio, hambre constante, visión borrosa y enuresis. El diagnóstico oportuno es crucial, y el papel de la familia, amigos y escuela es fundamental para brindar apoyo y comprensión.
El tratamiento de la diabetes tipo 1 implica un plan de alimentación adecuado, educación diabetológica, actividad física y administración de insulina. Afortunadamente, los avances médicos han mejorado los enfoques y tratamientos, como la administración continua de insulina y el monitoreo avanzado de glucosa.
A pesar de la falta de datos actualizados en Argentina, se estima que entre 800 y 1000 niños inician su lucha contra la diabetes tipo 1 cada año en el país. En este contexto, la conciencia, la educación y el apoyo son esenciales para garantizar un manejo efectivo y una vida plena para aquellos afectados por esta condición crónica.
Fuente: infobae.com