El gobierno avanza con la transformación de clubes en Sociedades Anónimas Deportivas

La Inspección General de Justicia establece las bases para permitir la inversión privada en clubes deportivos, con la medida en vigor desde noviembre.

21-08-2024 - Por Primera Página

El gobierno avanza con la transformación de clubes en Sociedades Anónimas Deportivas

El Gobierno dio hoy un paso decisivo hacia la transformación del deporte en Argentina, avanzando con la regulación para permitir la conversión de clubes deportivos en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD). La Inspección General de Justicia (IGJ) publicó una resolución detallada que marca el inicio de una reforma significativa para el sector.

La Resolución General 18/2024, que entrará en vigencia el 1° de noviembre, establece los requisitos para que las asociaciones civiles se transformen en sociedades anónimas. Los clubes deberán presentar una escritura pública de transformación, un nuevo estatuto, y detallar tanto a los actuales como a los nuevos socios. Además, se exige la elaboración de un balance especial de transformación que refleje la nueva estructura patrimonial.

El capital social de la nueva sociedad anónima deberá ser al menos igual al patrimonio neto de la asociación civil anterior, sumado al valor del aporte de nuevos socios. También se permite fijar una cifra inferior, siempre que cumpla con el capital mínimo requerido, con la diferencia imprevista destinada a una reserva especial.

Las decisiones sobre la adquisición de acciones deberán ser tomadas por una asamblea extraordinaria con mayoría de dos tercios de los asociados presentes, o delegadas al órgano de administración. La resolución también habilita a las asociaciones civiles a participar en sociedades anónimas ya constituidas o crear nuevas, ya sea como accionistas o como únicas accionistas en el caso de Sociedades Anónimas Unipersonales (SAU).

El presidente de la IGJ, Daniel Roque Vítolo, destacó que esta medida marca un avance claro e irreversible en la modernización del sistema deportivo, permitiendo a clubes y entidades captar inversiones y mejorar la eficiencia del sistema. Esta reforma, promovida por el presidente Javier Milei, no solo afecta al deporte, sino que también podría extenderse a otros sectores de la sociedad civil, incluyendo investigación, cultura, ONGs y producción de bienes y servicios.