Google, en sus 25 años de existencia, ha consolidado su posición como una de las empresas más influyentes en Internet. Su motor de búsqueda lidera indiscutiblemente el mercado y su sistema operativo Android es el líder global. Sin embargo, esta supremacía genera preguntas sobre posibles monopolios, aunque los esfuerzos para limitar a esta gigante tecnológica se ven atrapados en procesos burocráticos.

Según el corresponsal europeo del Financial Times, Javier Espinoza, algunos creen que las leyes antimonopolio llegaron tarde y han tenido poco impacto real. Se sugiere que empresas como Google podrían estar esperando que el proceso se estanque, como mencionó una vez un CEO de una compañía. Esta es solo una parte de cómo estas empresas se benefician de la situación.

Otro intento para frenar el poder de las Big Tech en la Unión Europea es la Ley de Mercados Digitales, que busca restringir la capacidad de estas empresas para promocionar sus propios servicios en sus plataformas. Sin embargo, su efectividad en la realidad aún está por verse, y solo el tiempo dirá si estas restricciones lograrán su objetivo.

Por ahora, los usuarios continúan utilizando las mismas plataformas para expresar sus quejas sobre las políticas empresariales, como se evidencia en los chats de WhatsApp. La elección del consumidor sigue desempeñando un papel fundamental en este panorama en constante evolución.