Los cálculos renales son una afección común y molesta, con una mayor incidencia en hombres que en mujeres. Se forman cuando ciertas sustancias se concentran en los riñones, generando cristales. Pero, ¿cómo se pueden eliminar estos cálculos rápidamente y prevenir su formación? Un médico de la Universidad de Harvard sugiere una bebida natural para abordar este problema.
Una de las bebidas más efectivas para prevenir los cálculos renales es el agua, pero el jugo de limón también juega un papel esencial. El Dr. Brian Eisner, codirector del Programa de Cálculos Renales en el Hospital General de Massachusetts, afiliado a Harvard, destaca la utilidad del jugo de limón debido a su contenido de citrato, una sal del ácido cítrico que se combina con el calcio y bloquea la formación de cálculos.
El citrato, que se encuentra en frutas cítricas como el limón, la naranja y la mandarina, es clave en la prevención de los cálculos renales. Consumir 1/2 taza de concentrado de jugo de limón diluido en agua diariamente o el jugo de dos limones puede aumentar la presencia de citrato en la orina, lo que reduce el riesgo de cálculos renales, según el médico de Harvard.
Además, investigaciones científicas respaldan el efecto del jugo de limón en la prevención de la recurrencia de cálculos renales. En un estudio publicado en The Lancet, se encontró que la suplementación con jugo de limón fresco en pacientes con nefrolitiasis por oxalato de calcio podría prevenir la recurrencia de cálculos.
Es importante destacar que el jugo de limón no solo previene, sino que también puede ayudar a eliminar cálculos renales existentes. El ácido cítrico presente en el limón puede descomponer los cálculos renales pequeños. Además de consumir jugo de limón, para prevenir cálculos renales, se recomienda beber suficiente agua, consumir alimentos ricos en calcio de origen vegetal, reducir la ingesta de sodio y limitar las proteínas animales. El limón, una fruta versátil, ofrece múltiples beneficios para la salud, incluyendo la reducción de la presión arterial, efectos diuréticos, y protección del corazón, entre otros. Los síntomas de cálculos renales pueden variar desde dolor abdominal hasta sangre en la orina y fiebre, y dependen del tamaño de los cálculos.