¿Quién Otorga la Certificación ISO y Cómo Reconocer un Aval de Confianza Global?

A la hora de encarar la certificación ISO, uno de los primeros desafíos consiste en saber a quién recurrir. Aunque las normas ISO son emitidas por la Organización Internacional de Normalización (ISO, por sus siglas en inglés), este organismo no se encarga directamente de conceder certificados. Esa tarea recae en entidades certificadoras que, a su vez, deben contar con la acreditación de organismos independientes y reconocidos a nivel mundial. Es aquí donde radica la diferencia entre un documento “oficial” y uno que podría quedarse en un simple adorno sin verdadero reconocimiento.

Los organismos de acreditación funcionan como la columna vertebral de la confiabilidad en materia de certificación, ya que ellos evalúan y avalan la competencia técnica, la imparcialidad y la rigurosidad de los entes certificadores. Para cada país o región, existen autoridades acreditadoras con prestigio internacional, como UKAS en el Reino Unido, ANAB en Estados Unidos, DAkkS en Alemania o EMA en México. Estas, a su vez, forman parte de redes globales como la International Accreditation Forum (IAF), que establece acuerdos de reconocimiento mutuo para garantizar que el sello sea válido más allá de las fronteras. Por eso, cuando un certificado ISO proviene de una entidad certificadora debidamente acreditada, se abren puertas en mercados internacionales, se satisface la demanda de clientes exigentes y se fortalecen las posibilidades de participar en licitaciones tanto nacionales como extranjeras.

El proceso para verificar si un organismo certificador goza de ese respaldo comienza por revisar su sitio web y sus documentos oficiales. Un ente serio y profesional, mostrará con transparencia sus acreditaciones e indicará con qué organismo de acreditación trabaja. Otra forma de corroborarlo es consultar los directorios o listados publicados por los organismos de acreditación oficiales; allí, encontrar el nombre de la certificadora y verificar su legitimidad. Si la información no coincide o no aparece, es conveniente que hay  que seguir investigando antes de tomar una decisión.

Como ejemplo de un organismo confiable, encontramos a GCerti, el cual opera bajo acreditaciones reconocidas a nivel internacional. Lo interesante de GCerti no es solo que ofrece certificaciones en distintas normas ISO, sino que aporta un enfoque de auditoría orientado tanto al cumplimiento de la norma como a la mejora continua de los procesos de negocio. Esta perspectiva resulta fundamental: ir más allá de revisar documentos y buscar, en cada auditoría, oportunidades de optimizar la gestión, la calidad o la seguridad de la información. De este modo, el valor de la certificación no se limita al prestigio de un sello, sino que impacta positivamente en la cultura organizacional y en la satisfacción de los clientes.

Elegir un aval de confianza global implica tomar en cuenta la experiencia y la reputación del ente certificador. Si este ha participado en proyectos de distintas industrias y maneja referencias concretas, es señal de que puede adaptarse y comprender la realidad de tu organización. También es válido preguntar directamente a otras empresas que ya se hayan certificado con esa entidad. Sus testimonios te permitirán confirmar si los procesos de auditoría fueron claros, justos y útiles para la mejora de la gestión interna.

La principal ventaja de una certificación con peso internacional es la libertad que te brinda para competir en diversos mercados y proyectar una imagen de seriedad y compromiso con la excelencia. Muchas empresas y gobiernos exigen, en sus licitaciones o alianzas comerciales, que los proveedores estén certificados por un organismo acreditado formalmente. Carecer de ello puede llegar a cerrar puertas importantes, lo cual explica por qué vale la pena invertir tiempo y recursos en una certificación sólida.

Antes de firmar cualquier contrato y comenzar el proceso de implementación, Hay que verificar quién será el socio en este camino de certificación.  Distinguir una certificación oficial de un simple papel decorativo es, en definitiva, una cuestión de investigar acreditaciones, solicitar referencias y apostar por organismos que demuestren trayectoria y transparencia. La expansión del negocio, la reputación y las oportunidades de crecimiento merecen un aval de confianza global que respalde con firmeza cada esfuerzo que se haga por elevar los estándares de calidad. Para más información sobre los beneficios de la certificación de las normas dirigirse a www.gcerti.org

Columna escrita por Fernando Arrieta, director regional de G-CERTI Global Certification: ¿Quién Otorga la Certificación ISO y Cómo Reconocer un Aval de Confianza Global?