
¿Tomarte un café cada mañana podría ayudarte a envejecer mejor? Un nuevo estudio de Harvard dejó una pista clave que cambia cómo pensamos esta costumbre diaria. Pero no todo el café sirve. Y tampoco cualquier fuente de cafeína. ¿Querés saber por qué?
Un equipo de investigadores de la Facultad de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard presentó un trabajo en la Sociedad Americana de Nutrición que analizó a más de 47.500 mujeres durante décadas. Todas eran parte del Estudio de Salud de las Enfermeras, que empezó allá por 1984. ¿El objetivo? Entender qué hábitos se relacionan con llegar bien a los 70 años: sin enfermedades graves, con buena memoria, movilidad y ánimo.
Y encontraron algo que llamó la atención: las mujeres que tomaban café con cafeína con frecuencia eran más propensas a envejecer saludablemente. No estamos hablando de una taza de vez en cuando. Las que mejor llegaron a esa edad tomaban, en promedio, unos 315 miligramos de cafeína por día, lo que equivale a unas tres tazas chicas de café.
Por cada 80 miligramos extra de cafeína diarios, aumentaban entre un 2% y un 5% las chances de envejecer bien. Pero ojo: este beneficio solo se asoció al café. Ni el té ni el café descafeinado dieron el mismo resultado. Y, más importante todavía, las gaseosas con cafeína se vincularon con un efecto opuesto: más probabilidades de tener un envejecimiento negativo.
Sara Mahdavi, autora principal y becaria postdoctoral en Harvard, explicó que estos datos muestran que el café con cafeína “podría respaldar de forma única trayectorias de envejecimiento que preservan tanto la mente como el cuerpo”. Aclaran, sin embargo, que se trata de un estudio observacional, y que todavía falta entender el “por qué” detrás de estos resultados.
Un dato importante: no se trata de convertir al café en una “fuente de juventud”. Según los propios investigadores, lo más determinante sigue siendo el estilo de vida completo: hacer ejercicio, comer sano, no fumar y dormir bien. El café podría ser una ayuda más, pero no reemplaza esos hábitos.
Ahora, el equipo planea investigar qué compuestos específicos del café estarían actuando sobre el cuerpo para lograr estos efectos. ¿Será la cafeína, los antioxidantes o algo más?
Por lo pronto, si ya tomás café todos los días, puede que estés haciendo algo bueno para tu futuro sin saberlo. Y si no, quizá sea momento de pensarlo. Pero siempre con moderación, claro.