

Una investigación por explotación sexual en La Plata culminó esta semana con la detención de Erika Anabella M., alias “La Clona”, acusada de regentear un prostíbulo en la zona de Melchor Romero, junto a otras dos mujeres. El caso salió a la luz tras la denuncia de una joven de 23 años, quien abandonó el lugar luego de negarse a tener sexo con cinco hombres a la vez. Fue contenida por la Dirección de Rescate y Acompañamiento a las Víctimas de Trata.
El hecho, investigado por el fiscal Juan Menucci de la UFI N°5, fue respaldado por semanas de videos encubiertos y operativos de la Policía Bonaerense. Las imágenes muestran el constante flujo de clientes en el prostíbulo, lo que terminó por confirmar la existencia del negocio.
Durante el allanamiento, autorizado por el Juzgado de Garantías N°1 a cargo de Guillermo Atencio, se hallaron 186 preservativos, lencería erótica y seis celulares que ahora serán peritados. En el lugar se identificó a siete mujeres mayores de edad ejerciendo la prostitución, entre ellas dos argentinas y cuatro paraguayas, provenientes de zonas vulnerables como Berisso y Avellaneda.
La denuncia expone el mecanismo de captación. La víctima conocía de vista a Aixa C., otra de las detenidas, quien le ofreció ingresar al negocio en condiciones abusivas: debía pagar $30.000 para comenzar a trabajar, $3.000 para figurar en Skokka —una de las principales plataformas de escorts—, y un canon diario de $32.500 para operar en el prostíbulo.
Según el testimonio de la joven, los abusos escalaron hasta que le exigieron prestar servicios grupales, momento en el que decidió no volver y denunciar el hecho. Gracias a su testimonio, la Justicia pudo intervenir.
Las imputaciones aún no fueron formalizadas, ya que el fiscal aguarda los resultados del análisis de los celulares, que podrían ser clave para determinar la magnitud de la red