Fumar marihuana todos los días no es inocente. Y si la combinás con tabaco, el riesgo puede ser todavía peor. Una nueva investigación de la Universidad de California en San Diego reveló un dato que prende una luz roja: el consumo excesivo de marihuana puede aumentar más de cuatro veces la probabilidad de desarrollar cáncer oral.

¿Por qué? Acá te lo explicamos fácil.

El humo de la marihuana no es tan distinto al del cigarrillo

El estudio, liderado por Raphael Cuomo, profesor de anestesiología en la UC San Diego, encontró que el humo del cannabis tiene muchos de los mismos compuestos cancerígenos que el del tabaco. Estos químicos dañan las células que recubren la boca. Si ese daño se repite todos los días, con el tiempo, puede llevar al desarrollo de cáncer oral.

¿A quiénes afecta más?

La investigación se enfocó en personas con uso diario o casi diario de marihuana, algo que los médicos llaman trastorno por consumo de cannabis. En Estados Unidos, más de 17 millones de personas dijeron consumir a ese nivel en 2022. El estudio analizó los datos de salud de más de 45.000 personas. De ese grupo, 949 fueron diagnosticadas con ese trastorno.

¿El resultado? Quienes tenían consumo problemático de marihuana eran 325% más propensos a tener cáncer oral en cinco años, incluso teniendo en cuenta factores como la edad o el tabaquismo.

Pero eso no es todo.

¿Marihuana y tabaco? Mala combinación

Los que además de fumar marihuana también fumaban cigarrillos estaban todavía peor. Su riesgo era 624% más alto que el de quienes no tenían consumo excesivo de cannabis.

Esto hace pensar que no se trata solo del humo. Los científicos creen que el THC, el principal componente de la marihuana, podría estar afectando el sistema inmunológico. Y eso haría que el cuerpo no pueda defenderse tan bien contra el cáncer.

¿Qué significa esto para vos?

Si fumás mucha marihuana, este estudio no busca asustarte, sino informarte. Aunque el cannabis tenga usos médicos y sea legal en muchos lugares, el consumo excesivo puede tener consecuencias graves, sobre todo si es diario y combinado con tabaco.

La investigación de la Universidad de California en San Diego se suma a una larga lista de estudios que alertan sobre los efectos del uso crónico de cannabis en la salud.