

¿Sabés qué pasa realmente con el transporte de cargas en Argentina y por qué las rutas están en tan mal estado? La situación es más grave de lo que parece, y Cristian Sanz, presidente de FADEEAC, no para de alertar sobre un problema que afecta a todos, aunque no siempre lo veamos.
El transporte de cargas mueve más del 90% de lo que se produce en el país, pero hoy está en jaque por varias razones. ¿Querés saber cuáles son y qué están pidiendo para cambiar? Te lo cuento en esta nota.
Según Cristian Sanz, desde hace años vienen avisando que las rutas se están deteriorando cada vez más. El informe técnico que prepara FADEEAC desde hace tres años muestra que el problema empeoró, y mucho, en el último año y medio por la falta de obras públicas. “No es culpa de un solo gobierno, pero la realidad es que la infraestructura vial está colapsada”, dijo.
Un caso grave es la zona de acceso norte a Vaca Muerta, por donde circulan hasta 600 camiones diarios con arena para fractura hidráulica. “Es la única entrada y salida para una región clave y parece una zona de guerra”, alertó Sanz. Además, hubo accidentes fatales en esas rutas, y también en tramos como la 151, que conecta La Pampa, Río Negro y Neuquén. Las rutas 7 y 8, en la Patagonia, también sufren por la falta de mantenimiento y el paso constante de vehículos pesados.
Otro foco de conflicto está en la emisión de licencias profesionales para los conductores. En la provincia de Buenos Aires, muchos municipios siguen entregando licencias sin exigir un curso de capacitación ni el examen psicofísico obligatorio, algo que el nuevo esquema nacional sí pide. Esto genera licencias legales pero con “vicios de origen”, según Sanz, y puede traer problemas legales y de seguridad.
Para contrarrestar esto, FADEEAC y su Fundación Profesional para el Transporte ofrecen formación permanente en más de 80 sedes en todo el país, con un centro de referencia en Escobar. Reclaman que el país adopte un sistema uniforme para las licencias, que garantice la capacitación adecuada de los choferes.
Lo más preocupante, según Cristian Sanz, es que todavía no hubo diálogo serio con el Gobierno nacional. “No nos convocaron, ni siquiera al secretario del área”, dijo, a pesar de que FADEEAC se ofreció a colaborar para encontrar soluciones en infraestructura, seguridad y formación.
La falta de coordinación, además, estaría ligada a cuestiones políticas: por ejemplo, la negativa de Buenos Aires a adherir al nuevo esquema de licencias nacional parece más una disputa entre jurisdicciones que una cuestión técnica.
El deterioro vial encarece el transporte y pone en riesgo economías regionales. En Bahía Blanca, ciudad natal de Sanz, las inundaciones recientes destruyeron parte de la infraestructura local, y sin ayuda estatal será muy difícil recuperarse.
Con más de 6.000 empresas y unos 100.000 trabajadores, el sector del transporte de cargas es vital para la Argentina. Pero la falta de respuestas deja a todos en un callejón sin salida. ¿Se podrá revertir esta crisis sin un compromiso real del Estado y el sector privado? La respuesta, por ahora, sigue abierta.