viernes 15 de agosto de 2025 - Edición Nº5253

Información General | 14 Aug

¿Qué es la progeria? Síndrome poco común y envejecimiento acelerado que sorprende a todos

¿Te imaginaste alguna vez vivir como Benjamin Button, ese personaje que envejece al revés? Más allá de la ficción, existe un síndrome poco común.


¿Te imaginaste alguna vez vivir como Benjamin Button, ese personaje que envejece al revés? Más allá de la ficción, existe un síndrome poco común que hace que el cuerpo de quienes lo padecen envejezca muy rápido desde la infancia. Se llama síndrome de Hutchinson-Gilford, también conocido como progeria, y aunque es muy raro, su historia y avances médicos están revolucionando el mundo.

La progeria es un trastorno genético que provoca un envejecimiento acelerado en los niños. Afecta a menos de uno de cada cuatro millones de recién nacidos y hace que su cuerpo muestre signos de vejez prematura: piel arrugada, pérdida de cabello, problemas óseos y dificultades cardíacas. La mayoría de quienes la tienen no llegan a superar los 14 años, aunque algunos casos excepcionales como el de Kaylee Halko, que hoy tiene 22, desafían esa estadística.

Musical.ly Star Kaylee Halko Won't Let Rapid-Aging Disease Slow Her Down -  Business Insider

Entonces, ¿qué pasa realmente en la progeria? El problema está en un gen llamado LMNA que produce una proteína defectuosa llamada progerina. Esta proteína daña las células y acelera el envejecimiento del cuerpo. Por eso, los niños con este síndrome muestran características físicas muy similares a las personas mayores, a pesar de ser muy jóvenes.

El diagnóstico se realiza a partir de síntomas visibles y pruebas genéticas que detectan esa mutación. Sin embargo, vivir con progeria implica más que solo un diagnóstico: implica desafíos diarios, desde problemas médicos hasta situaciones sociales complicadas. Kaylee Halko, por ejemplo, tuvo que enfrentar el bullying y la incomprensión en la escuela, pero hoy usa las redes sociales para educar y sensibilizar sobre esta enfermedad.

El impacto de este síndrome poco común no es solo físico. Personas como Sam Berns y Sammy Basso también demostraron con sus historias que, aunque el cuerpo envejezca rápido, la mente y el espíritu pueden ser fuertes y resilientes. Ambos se convirtieron en referentes internacionales para pacientes y familias, ayudando a difundir información y generar apoyo.

La buena noticia es que la ciencia avanza rápido. Desde que en 2002 se identificó la mutación responsable, se desarrollaron tratamientos como el lonafarnib, que ralentiza el envejecimiento y prolonga la vida. Actualmente, investigaciones sobre terapias genéticas y nuevos medicamentos buscan corregir directamente el problema en el ADN. Técnicas de edición genética ya lograron resultados sorprendentes en animales, aumentando la esperanza de vida y reduciendo la producción de progerina.

Aunque todavía hay mucho por hacer, la combinación de avances médicos, apoyo social y la valentía de pacientes como Kaylee dan esperanza a quienes conviven con este síndrome de Hutchinson-Gilford.

Si querés entender mejor cómo funciona este extraño fenómeno del cuerpo humano, seguí leyendo sobre esta condición que mezcla realidad y ciencia, y que nos invita a valorar el tiempo y la vida de una manera diferente.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias