

¿Alguna vez te preguntaste si todo lo que creés sobre el orgasmo femenino es cierto? Hoy, en el Día Internacional del Orgasmo Femenino, es el momento perfecto para despejar dudas, romper mitos y entender cómo sentir placer realmente.
En los últimos años, la sexualidad femenina ha dado un giro: más mujeres se animan a conocer su cuerpo y a explorar lo que les genera placer. Durante décadas, los genitales femeninos estuvieron marcados por tabúes, temor y pudor. Hoy, la libertad es la protagonista: sentir placer y expresar lo que les gusta ya no es un secreto.
Sin embargo, la anorgasmia afecta a más del 20 % de las mujeres adultas. La causa principal suele ser el escaso contacto con el propio cuerpo y sus sensaciones. Muchas mujeres desconocen sus genitales y todavía creen que los orgasmos pueden ser únicamente vaginales o que la penetración por sí sola alcanza el clímax. En realidad, la estimulación del clítoris es la vía más común para lograrlo.
Las inhibiciones vienen de falsas creencias y mitos que aún persisten: “debo complacer al hombre primero” o “el sexo siempre debe terminar en orgasmo”. Estas ideas dejan de lado el deseo femenino y limitan la experiencia de sentir placer en su totalidad. Las jóvenes de hoy buscan libertad en cuerpo y alma, sin reglas impuestas, disfrutando de su sexualidad sin culpa.
El orgasmo es el resultado del placer, ya sea en encuentros sexuales con otra persona o autoeróticos. Pero muchos mitos rodean este fenómeno. Te contamos los más frecuentes:
Estudios demuestran que solo el 18,4 % de las mujeres alcanza el orgasmo únicamente con penetración. En cambio, el 36,6 % necesita estimulación del clítoris. Esto muestra que sentir placer no depende del coito.
No existe una regla para sincronizar los orgasmos. Cada persona alcanza el clímax según su excitación. La presión por coincidir puede generar ansiedad y disminuir el placer. Lo importante es acompañarse y disfrutar los tiempos propios.
El sexo puede ser gratificante sin un clímax final. Juegos, comunicación, exploración del cuerpo y dar placer a la pareja son igual de importantes. La obsesión por alcanzar el orgasmo puede incluso arruinar la experiencia.
Romper estos mitos permite que más mujeres conozcan su cuerpo y aprendan a sentir placer plenamente. Recordá: no hay reglas fijas, y la sexualidad es una herramienta para disfrutar, descubrirse y vivir experiencias auténticas.