

¿Sabías que el huevo no es la opción más proteica para tu desayuno? Muchos creen que empezar el día con huevo es suficiente, pero existen alimentos que superan su aporte y suman beneficios extra para tu salud. Hoy te contamos cuáles incorporar según especialistas y estudios de Real Simple, para que tu primera comida del día sea realmente nutritiva.
Consumir suficiente proteína al despertar es clave: ayuda a mantener la masa muscular, controla el apetito y regula el azúcar en sangre. Según Harvard Health Publishing, 20 a 30 gramos de proteína en el desayuno prolongan la saciedad, reducen antojos y favorecen la reparación de tejidos.
Con 20,8 gramos de proteína por cada 100 gramos, duplica al huevo y aporta grasas saludables, fibra y minerales como magnesio y zinc. Los estudios indican que su consumo regular mejora la salud cardiovascular y el control glucémico. Ideal untada en pan integral o sobre frutas.
Ofrece 18,3 gramos de proteína y ácidos grasos omega-3 que favorecen el corazón y la función cerebral. Especialistas recomiendan incluir pescado al menos dos veces por semana. Para un desayuno rápido: tostada integral con salmón y palta.
13,2 gramos de proteína por 100 gramos y libre de colesterol. Rico en minerales y compuestos antioxidantes. Salteado con cúrcuma, ajo y verduras se convierte en un desayuno completo y nutritivo.
Con 13,2 gramos de proteína, aporta aminoácidos esenciales mejor absorbidos que los del pan blanco. Su bajo índice glucémico y fibra ayudan a la saciedad y al control del azúcar.
Hasta 10 gramos de proteína por 100 gramos y probióticos que cuidan la digestión y ayudan al control de peso. Ideal combinado con frutas y frutos secos.
12,5 gramos de proteína y fibra soluble que mejora la salud cardiovascular y metabólica. Cocinarla con leche o agua y sumar frutas, canela o mantequilla de almendras la hace un desayuno potente y delicioso.
11,6 gramos de proteína por 100 gramos, bajo en carbohidratos y alto en saciedad. Su consumo regular ayuda al control glucémico y a mantener la masa muscular. Perfecto con frutas o tostadas integrales.
Incorporar estas opciones con más proteína que el huevo transforma el desayuno en un momento nutritivo y completo. Alternar fuentes permite mejorar la saciedad, cuidar el corazón y potenciar la salud general. Y aunque cada alimento tiene su aporte único, combinarlos estratégicamente puede cambiar la manera en que empiezas el día… ¿querés saber cuál es la combinación ideal según los especialistas?