

¿Qué pasó con los precios de la canasta básica en el último año? No todos los alimentos y artículos de uso diario siguieron la misma tendencia que marcó la inflación general del Indec. Mientras algunos subieron fuerte, otros apenas se movieron… e incluso hubo varios que bajaron. ¿Cuáles son esos productos y qué significa para tu bolsillo?
El Indec informó que la inflación interanual fue del 43,5%. Sin embargo, algunos básicos quedaron muy por debajo:
Harina común 000: +9,11% (de $786,85 a $858,57).
Yerba mate (500 g): +4,95% (de $2.120,84 a $2.225,85).
Fideos guiseros (500 g): +4,41% (de $1.399,70 a $1.461,39).
Azúcar (1 kg): +1,43% (de $1.104,68 a $1.120,46).
Estos casos muestran que no todo lo que comemos o usamos todos los días se disparó al mismo ritmo.
En lácteos, los quesos también se movieron menos: el cremoso subió 26,27%, el pategrás 38,89% y el sardo 33,90%. Entre productos de limpieza, el detergente líquido trepó 14,91% y la lavandina 16,52%.
Hubo cuatro productos que directamente redujeron su precio, algo poco común en un contexto inflacionario:
Cebolla: -34,97% (de $1.138,07 a $740,13).
Tomate redondo: -26,46% (de $3.750,92 a $2.758,44).
Arroz blanco simple: -20,89% (de $2.351,11 a $1.860,08).
Lechuga: -11,95% (de $3.430,29 a $3.020,43).
Acá se ve el impacto de la estacionalidad y del clima, que hacen que las verduras frescas fluctúen más que los secos.
En el otro extremo están los cortes de carne y algunos alimentos procesados, que subieron mucho más que la inflación promedio:
Asado: +68,63% (de $6.506,47 a $10.971,63).
Nalga: +63,32%.
Cuadril: +63,17%.
Filet de merluza fresco: +45,81%.
Café molido (500 g): +71,17%, el salto más fuerte entre envasados.
También hubo alzas en bebidas: el agua sin gas subió 54,52% y las gaseosas 44,33%.
Aunque la inflación pega de lleno en la canasta básica, no todos los precios se mueven igual. Hay productos que ofrecen cierto alivio y otros que presionan más el gasto familiar. Según el Indec, conocer estas diferencias permite entender mejor en qué rubros se siente más la suba del costo de vida y dónde se pueden encontrar respiros en medio de un escenario inflacionario.