

Por: Jonatan Anaquin
El partido del jueves en Rosario por los cuartos de final de la Copa Argentina no es uno más para River. Marcelo Gallardo, que definió el duelo ante Racing como “una final”, encara la previa con la necesidad de reordenar piezas luego del golpe sufrido en el Monumental frente a Riestra. Entre la bronca por rendimientos flojos, la obligación de recuperar la identidad y la mirada puesta en un árbitro que ya dejó heridas abiertas, el Millonario juega mucho más que 90 minutos.
En el último ensayo, el DT dejó pistas claras: Lautaro Rivero y Gonzalo Montiel volverían a la titularidad en lugar de Paulo Díaz y Fabricio Bustos, respectivamente. Ambos descansaron en el partido anterior y se perfilan como titulares para reforzar la defensa. En el medio, Enzo Pérez sigue siendo una incógnita: su físico lo condiciona y todo indica que, si llega, será desde el banco. La dupla central quedaría a cargo de Portillo y Galoppo, con la incógnita de si Castaño mantiene su lugar o si ingresa un volante más creativo como Nacho Fernández o Lencina.
En ofensiva, la lógica dice que Juanfer Quintero no se toca. Maxi Salas repite titularidad, mientras que el gran interrogante pasa por Miguel Borja, quien otra vez quedó en deuda contra Riestra. Sin Driussi, lesionado, las variantes son Colidio o reforzar el medio para ganar control en la transición.}
La designación de Hernán Mastrángelo como árbitro sumó tensión a la previa. Aunque las estadísticas lo muestran favorable a River —ocho triunfos, cuatro derrotas y tres empates en 15 partidos—, en Núñez no se olvidan de sus fallos más cuestionados.
En 2023, en un River vs. Instituto, convalidó un gol con mano evidente de Santiago Rodríguez pese a la revisión del VAR. Meses antes, en Rosario, en la victoria ante Newell’s, no expulsó a Brian Aguirre tras un planchazo contra González Pirez que pudo haber cambiado el destino del partido.
Y si algo preocupa más, es que en esta Copa Argentina no habrá VAR: las decisiones quedarán exclusivamente en manos del juez. Con ese antecedente, la frase “guardia alta” se convierte casi en un lema de supervivencia.
Tras la derrota con Riestra, el propio DT del rival elogió a Gallardo con una frase que recorrió el país: “Perder contra Gallardo no es cualquier cosa”. Sin embargo, el Muñeco sabe que el prestigio se defiende adentro de la cancha y que su equipo necesita volver a mostrar personalidad y carácter en los momentos clave.
El partido contra Racing, entonces, no solo define un pasaje a semifinales. Es también un examen de orgullo, de liderazgo y de capacidad de respuesta en un escenario donde cada detalle cuenta: desde el armado del 11 hasta el silbato del árbitro.
Así formaría River
Franco Armani; Gonzalo Montiel, Lucas Martínez Quarta, Lautaro Rivero, Marcos Acuña; Kevin Castaño, Juan Portillo, Giuliano Galoppo; Juanfer Quintero; Maxi Salas y Miguel Borja o Facundo Colidio o Nacho Fernández.