

El debut de Franco Colapinto en el circuito urbano de Marina Bay no fue el esperado. El joven piloto de Pilar cerró la primera sesión de entrenamientos en el anteúltimo lugar, con un registro de 1:33,324, quedando a 2s208 de la referencia marcada por el español Fernando Alonso con su Aston Martin.
Detrás del asturiano se ubicaron Charles Leclerc (Ferrari), a solo 150 milésimas, mientras que el podio provisorio se completó con Max Verstappen (Red Bull) y Lewis Hamilton (Ferrari). Más atrás, los McLaren de Oscar Piastri y Lando Norris ocuparon el quinto y sexto puesto.
Para Colapinto, la sesión sirvió como primer contacto para ajustar el Alpine, de cara a la segunda práctica que se disputa más tarde. El único piloto que no pudo completar tiempos fue el tailandés Alexander Albon (Williams), quien sufrió problemas mecánicos en su monoplaza.
Más allá de los números, el argentino reconoció que el rendimiento del auto es impredecible, algo que complica aún más el panorama en un trazado tan exigente como el de Singapur: “En un circuito urbano no hay margen de error, y con un coche que no responde es más difícil”.
En medio de la incertidumbre sobre su continuidad en la Fórmula 1 para 2026, Colapinto encara un fin de semana marcado por el calor, la humedad extrema y las dificultades técnicas de Marina Bay, un escenario en el que cada mínima falla puede costar muy caro.
“Estamos teniendo dificultades, no es donde queremos estar y el paquete no es lo que esperábamos”, admitió con crudeza el piloto argentino, aunque destacó el trabajo de su equipo para encontrar soluciones en las últimas carreras.