

Cuando el escándalo del robo de miles de millones desde la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) a manos de Spagnolo y la droguería Suizo Argentina, aún sigue derritiendo la imagen de Javier y Karina 3% Milei, VisionPolitica.com.ar encontró un caso parecido en la desastroza administración de Axel Kicillof en PBA.
Desde su primer día en La Plata, allá por diciembre de 2019, el gobernador de Buenos Aires se encargó de construir una imagen suya diametralmente opuesta a la de su antecesor Daniel Scioli, un típico ladronzuelo de la política más casta y corrupta de la Argentina.
"Axel no roba, es más honesto que la Madre Teresa de Calcuta", iedealizaró en los medios pagos y obsecuentes, la estudiantina lacaya e inútil de porteños de escritorio y sin territorio que lo rodea y ocupa ministerios, cajas y poder.
Sin embargo y a pesar de los sobres que sobrevuelan algunas redacciones periodísticas porteñas y platenses, se fueron conociendo poco a poco centenares de casos de corrupción en la admnistración provincial bonaerense.
Licitaciones amañadas y escandalosas, contratos millonarios para funciones inexistentes o duplicadas, choferes que traen a los funcionarios desde CABA y vuelven a buscar a sus esposas para llevarlas de shoping o a buscar los chicos a la escuela, con autos, trabajadores y nafta que pagamos todos, son solo algunos contundentes ejemplos de administración fraudulenta de la gestión Kicillof.
Pero como esa lista es larga y el tiempo periodístico no, vamos por partes dijo "Jack el Destripador". En el ex Consejo Provincial del Menor, ahora Organismo Provincial de la Niñez y Adolescencia, sus funcionarios recaudaron 45 millones para la campaña del 7 de septiembre y otros 45 para la que terminará este domingo 26 de octubre.
Según todos los casos que pudo chequear VisionPolitica.com.ar el pedido llegó desde la Gobernación al ministro Andrés "Cuervo" Larroque y éste la ejecutó a través de sus funcionarios delegados en Minoridad. La figura central sería el director de Centros de Contención Penal, Claudio Gabriel "la Momia" Otero, un ex barrabrava de Nueva Chicago.
Otero habría sido el recaudador, ajustando partidas destinadas a los institutos penales (área que él mismo maneja) y los hogares de menores donde se alojan miles de chicos indigentes. Los métodos serían variados, pero predominarían las cajas chicas enormes, los viáticos y horas del personal y el pedido de aportes de campaña a empleados históricamente favorecidos por su dedo ensobrado, entre otros.
El sistema de entrega de lo recaudado funcionaría de un modo similar al de la policía bonaerense, con bolsas de consorcio negras reforzadas llenas de billetes que saldrían de las oficinas de Admisión en 3 y 63 y llegarían al segundo piso del desmantelado edificio de Desarrollo Social en 55 entre 6 y 7 del centro platense,
Desde allí hasta el despacho muy cercano al del primer mandatario provincial donde se juntaría, contaría y separaría el dinero, hay menos de trescientos pasos. El Cuervo los recorre volando en su moderno auto oficial cada vez que es requerido. Otras áreas sensibles del ministerio de los pobres también fueron aportantes forzadas de fondos de campaña, pero esa es otra parte de la historia, que relataremos en otra oportunidad.