El caluroso mediodía platense escupe fuego y no solamente desde el sol abrasador que desata todo su poder calórico, sino por la falta de micros de tres líneas fundamentales.
Se trata de las líneas 307, 275 y 506, todas propiedad de la inescrupulosa empresa Fuerte Barragán.
Un verdadero lío se armó en el transporte público, afectando a miles de platenses que se quedaron esperando bajo el sol.
Es un papelón que se repite: los choferes, cansados de los incumplimientos, dijeron "basta" y decidieron frenar la marcha. "Si no está la plata completa, el bondi no sale", aseguran los actores del volante.
La bronca de los laburantes se hizo sentir y las consecuencias las pagaron los vecinos que se mueven entre Ensenada, el centro de La Plata, parte de la zona norte y la zona sur.
La causa: El detonante de la medida de fuerza es el pago parcial de los salarios. Las empresas no depositaron el sueldo completo, y los trabajadores de las tres líneas de micros afectadas decidieron no prestar servicio hasta que se regularice la situación.
La Gente de rehen: Las filas en las paradas son eternas y la incertidumbre es total. Esto genera un efecto dominó en toda la ciudad, obligando a los usuarios a gastar fortunas en taxis o a caminar distancias largas.
Las fuentes vinculadas al conflicto confirmaron la medida y la falla en los pagos. Mientras se espera una definición oficial y que se regularice el depósito, el transporte La Plata sigue en crisis.
La repetición de este conflicto salarial micros La Plata evidencia la fragilidad del sistema y la falta de compromiso de las empresas con sus empleados.
Es una falta de respeto al trabajo y, sobre todo, un ninguneo a los miles de vecinos de La Plata que pagan el boleto y merecen un servicio digno.