Con la temporada del fútbol argentino ya concluida y el mercado de pases en plena ebullición, Benjamín Rollheiser vuelve a ocupar un lugar central en la agenda del fútbol local. Talentoso, desequilibrante y con pasado reciente en Estudiantes, su apellido aparece una vez más asociado a posibles regresos y llamados que, por ahora, no pasaron de los rumores.

Tras su salida del Pincha a comienzos de 2024, Rollheiser vivió un recorrido internacional con contrastes. Su paso inicial por Benfica no logró el impacto esperado, pero el cambio de escenario fue determinante: Santos de Brasil le abrió las puertas y lo unió nada menos que con Neymar, en un contexto de mayor continuidad y protagonismo.

En su primera temporada completa en el fútbol brasileño, el extremo disputó 40 partidos oficiales, sumó rodaje, experiencia y volvió a mostrar destellos de la versión que lo convirtió en una de las figuras del fútbol argentino. Ese rendimiento fue suficiente para reactivar el interés de varios clubes del país.

En La Plata, los hinchas de Estudiantes sueñan con su regreso para afrontar la Copa Libertadores, una competencia que el jugador conoce y donde dejó huella. Sin embargo, también Racing e Independiente fueron señalados como posibles destinos. Según pudo saber 0221.com.ar, ninguna de esas versiones se tradujo en contactos formales: no hubo llamados ni gestiones concretas desde el fútbol argentino.

Desde el entorno del futbolista confirman que, más allá del cariño por Estudiantes y su deseo de volver algún día a La Plata, hoy la prioridad pasa por otro lado. Rollheiser tiene la intención de continuar en Brasil, afianzarse en Santos y competir a nivel internacional con la Copa Sudamericana como gran objetivo.

En el cuerpo técnico de Eduardo Domínguez, conscientes de la necesidad de incorporar futbolistas con sus características, no avanzaron en ningún tipo de negociación. La realidad económica, los tiempos del mercado y el presente deportivo del jugador conspiran contra un retorno inmediato.

Así, mientras su nombre vuelve a circular con fuerza en cada mercado, Benjamín Rollheiser transita un momento de definición silenciosa: el deseo existe, el interés también, pero su presente y su proyecto personal hoy miran hacia Brasil, lejos —al menos por ahora— del fútbol argentino.