La industria global de los videojuegos amaneció sacudida por una noticia devastadora: Vince Zampella, cocreador de la saga Call of Duty y una de las mentes más influyentes del entretenimiento interactivo, murió a los 55 años en un accidente automovilístico ocurrido el domingo por la tarde en Los Ángeles, California.
El siniestro tuvo lugar sobre la Angeles Crest Highway, una ruta escénica y sinuosa que conecta zonas montañosas con vistas al Valle de San Gabriel. Zampella conducía una Ferrari cuando el vehículo se desvió de la calzada poco después de atravesar un túnel e impactó contra una barrera de concreto, según reportes de la Patrulla de Caminos de California. Tras el choque, el automóvil se incendió, dejando al ejecutivo atrapado en el interior. Murió en el lugar.
Un pasajero que lo acompañaba fue eyectado del vehículo y trasladado de urgencia a un centro médico, donde falleció horas más tarde. El incidente fue reportado alrededor de las 12.45 del mediodía (hora local). Las causas exactas del accidente aún no fueron esclarecidas, y permanecen bajo investigación.
Un video aportado por un testigo, difundido por medios estadounidenses, muestra el momento posterior al impacto. El vehículo involucrado habría sido una Ferrari 296 GTS modelo 2026, un deportivo de lujo con motor V6 biturbo híbrido y más de 800 caballos de fuerza, una máquina diseñada para el alto rendimiento que terminó reducida a restos calcinados en segundos.
Hablar de Vince Zampella es hablar de una era. Cofundador de Infinity Ward en 2002, junto a Grant Collier y Jason West, fue el impulsor creativo de Call of Duty, franquicia que no solo redefinió el género bélico, sino que vendió más de 500 millones de copias en todo el mundo.
Bajo su liderazgo nacieron títulos emblemáticos como Call of Duty: Modern Warfare (2007) y Modern Warfare 2 (2009), juegos que marcaron a una generación y establecieron nuevos estándares narrativos y técnicos en la industria.
Tras su salida de Infinity Ward, fundó Respawn Entertainment en 2010, estudio desde el cual volvió a dejar huella con Titanfall y, más tarde, Apex Legends, uno de los videojuegos multijugador más exitosos y jugados del planeta. En 2017, Respawn fue adquirido por Electronic Arts (EA), que confió en Zampella un rol clave dentro de su estructura.
En los últimos años, EA lo había designado responsable creativo de la saga Battlefield, cuyo último lanzamiento, Battlefield 6, recibió una valoración positiva por parte de la crítica, reafirmando la vigencia de su visión.
La muerte de Vince Zampella deja un vacío difícil de dimensionar. Fue más que un ejecutivo o un desarrollador: fue un arquitecto del videojuego moderno, capaz de anticipar tendencias, formar equipos de elite y transformar ideas en fenómenos culturales globales.
Su historia recuerda que, detrás de las franquicias multimillonarias y los récords de ventas, hay personas, decisiones humanas y destinos imprevisibles. La industria pierde a uno de sus pilares; los jugadores, a una figura que cambió para siempre la forma de jugar.