La reconocida parrilla Lo de Seba, uno de los clásicos gastronómicos de Ensenada, avanza con la construcción de una nueva sucursal en Punta Lara, en una señal clara de expansión y fortalecimiento del emprendimiento. El proyecto, lejos de implicar una mudanza, confirma que el histórico local del Camino Vergara continuará funcionando con normalidad, despejando versiones que hablaban de un posible cierre.
La nueva sede se levanta en un punto estratégico de la localidad costera, en las inmediaciones de la avenida Almirante Brown y la calle 5, a pocos metros del emblemático Palacio Piria, uno de los íconos urbanos frente al Río de la Plata. Se trata de una zona de alto tránsito y fuerte valor simbólico, lo que refuerza la apuesta comercial y turística del emprendimiento.
Según confirmaron fuentes locales, las obras ya se encuentran en una etapa avanzada y el nuevo espacio “está quedando muy lindo”, aunque por el momento no hay una fecha oficial de inauguración ni detalles definidos sobre la capacidad o el formato que tendrá la flamante sucursal. La decisión responde al muy buen presente de la parrilla, que continúa siendo un punto de referencia para comensales de Ensenada, La Plata, Berisso y toda la región.
La expansión adquiere un valor especial si se tiene en cuenta lo ocurrido meses atrás. A mediados de este año, Lo de Seba estuvo al borde del cierre luego de un incendio de gran magnitud que afectó el sector de la cocina del local ubicado en 43 y 128. En aquel episodio intervinieron cinco dotaciones de bomberos, que lograron controlar las llamas antes de que se propagaran, aunque los daños materiales fueron significativos.
Pese al impacto del siniestro, el comercio logró reabrir en poco tiempo, recuperarse y retomar su actividad con fuerza. Hoy, esa capacidad de sobreponerse se traduce en una decisión estratégica de crecimiento, que consolida a la parrilla como uno de los emprendimientos gastronómicos más sólidos de la zona.
Con una nueva sucursal en camino y su local histórico en plena actividad, Lo de Seba confirma que el fuego que lo marcó no lo apagó, sino que impulsó una nueva etapa de expansión.