Gimnasia comenzó una profunda reestructuración de su plantel de cara a la temporada 2026. En medio de un escenario financiero delicado y con la llegada de Fernando Zaniratto como conductor del nuevo proceso, la dirigencia avanzó en una depuración significativa, que dejará a más de una decena de futbolistas fuera del inicio de la pretemporada.

Con el cierre del año, el Lobo tomó decisiones clave: contratos que vencen, préstamos ya acordados y posibles rescisiones anticipadas configuran un panorama de fuerte recambio en Estancia Chica.

Entre los casos que aún no tienen resolución definitiva aparecen Renzo Giampaoli y Augusto Max, cuyos vínculos finalizan este 31 de diciembre.

• En el caso del defensor central, la negociación con Boca es compleja y su continuidad asoma lejana.

• El mediocampista, en tanto, deberá definir si acepta las condiciones deportivas y económicas que ofreció la dirigencia tripera.

Ya está confirmado que no continuarán en Gimnasia y finalizarán su vínculo a fin de año:
Norberto Briasco, Matías Melluso, Bautista Merlini, Jan Hurtado, Nicolás Garayalde y Juan Villalba.

A esta lista se suman futbolistas que ya definieron su futuro en otros clubes:

• Luis Ingolotti, con acuerdo cerrado para incorporarse a Atlético Tucumán.

• Alejandro Piedrahita, que seguirá su carrera en Bulgaria.

• Santino Primante, actualmente en Midland.

Dentro de los jugadores con contrato vigente, también habrá movimientos:

• Alan Sosa será cedido a Aldosivi en busca de continuidad.

• Maximiliano Zalazar y Sebastián Lomónaco podrían rescindir sus contratos debido a la falta de minutos y consideración.

Además, existen situaciones a definir:

• Mateo Seoane y Juan José Pérez, sin participación en los últimos seis meses, mantienen un año más de vínculo, pero su futuro es incierto.

• Leandro Mamut aparece como candidato a salir a préstamo para sumar rodaje.

Con este panorama, Gimnasia volverá a los entrenamientos este viernes 2 de enero, iniciando la pretemporada con al menos 11 jugadores menos respecto al cierre del último torneo. La limpieza del plantel es el primer paso de un proceso que buscará ordenar las cuentas y rearmar el equipo con una identidad clara.

El mensaje es contundente: en el Gimnasia 2026 nadie tiene el lugar asegurado y el recambio ya está en marcha.