El boxeador Carlos Monzón es considerado por muchos como el máximo exponente de este deporte en la Argentina, pero antes de la gloria máxima, hubo un platense que lo dejó en la lona.
p>Se trata de Antonio "Cacho" Aguilar, un vecino de La Plata que nació un 15 de octubre de 1940, y en debutó como boxeador un 2 de febrero de 1962. En agosto de ese año ya estaba deslumbrando a todos en el Luna Park.Los especialistas de la época aseguraban que Cacho era dueño de una técnica inigualable, era un gran tiempista y era la gran promesa del peso Mediano, solo era opacado por otro joven santafecino, un tal Carlos Monzón.
En total, Aguilar disputó 108 peleas, ganando 79 de ellas (15 por nocaut), perdiendo 18 y empatando otras 11. En 1962 y 1963, Aguilar disputó 20 combates y ganó todos ellos.
Pero la historia es que en el 63' se enfrentó a su rival, Carlos Monzón, en un esperado combate en el ya nombrado templo del boxeo. Un Luna Park repletó fue testigo de como el platense venció por puntos al -en ese entonces no tan- histórico boxeador y actor.
Años más tardes, Aguilar llegó desde la ciudad de las diagonales hacia el Madison Square Garde, cuando en 1969 venció al panameño Humberto Trottman.
Pero la historia entre Aguilar y Monzón no terminaría allí: el campeón mundial tuvo su revancha dos veces contra el platense. Además, Cacho fue el sparring de Benvenutti, en el tiempo de su recordada pelea frente a Monzón.
Producto de ese combate, Carlos Monzón se consagró en campeón mundial y debió resignar a su título nacional, que quedó a manos de Aguilar, por ser el argentino mejor posicionado en el ránking. Fuentes: lamovidaplatense.info y laplata1.com