El seleccionado argentino estrenó este jueves el título de campeón de la Copa América alcanzado hace menos de dos meses en Brasil con una victoria sin complicaciones sobre Venezuela por 3 a 1, en el partido de la novena fecha de Eliminatorias Sudamericanas disputado en el estadio Olímpico de la Universidad Central de Caracas.
p>Argentina jugó un partido cómodo ante un rival que no lo exigió en ningún momento, y a partir de ello no sufrió amonestaciones que pudieran complicar la participación de los 10 futbolistas que llegaron a este cotejo con una tarjeta amarilla y de sumar otra se hubiesen perdido el cotejo del próximo domingo a las 16 ante el líder de estas Eliminatorias, Brasil, en el estadio Arena Corinthians, de San Pablo.En medio de este panorama el único momento de zozobra que vivió el equipo argentino ocurrió sobre la media hora del primer tiempo cuando el fornido zaguero central venezolano Luis Martínez, que había ingresado cinco minutos antes por el lesionado José Velázquez, le cometió una violentísima infracción a Lionel Messi sobre la pantorrila izquierda que hizo temer consecuencias duras que sin embargo no fueron tales.
Si Venezuela ya venía castigado por este proceso de transición que está atravesando su seleccionado tras la renuncia del entrenador portugués José Peseiro, que abandonó el cargo luego de percibir su salario en solamente cuatro de los 19 meses que estuvo al frente de la "Vinotinto", por lo que es reemplazado interinamente por Leonardo González, entrenador de Deportivo Lara, para esta triple fecha de Eliminatorias, peor le fue todavía.
Cuando ya se jugaba el segundo minuto de descuento un toque preciso de Ángel Di María de la izquierda al medio ('Fideo" estuvo perdido cuando se paró por derecha) para Lo Celso, terminó en una precisa asistencia de éste para que Lautaro Martínez convirtiera el primer tanto "albiceleste", el decimoquinto suyo en 30 partidos con la selección.
El que cerró el espectáculo fue el talentoso Yeferson Soteldo al colocar el 1-3 en el tercer minuto de descuento, a través de un tiro penal sancionado a través del improvisado VAR que le picó con categoría a Emiliano Martínez, quizá advertido de lo que calza "Dibu" a la hora de pararse frente a ejecutantes desde los 12 pasos.