CASTA | Agustín Romo, el diputado de LLA que está llenando de familiares el Estado
¿Sabías que mientras se habla de recortes, algunos siguen sumando familiares al Estado?
Esta historia que te vamos a contar sobre Agustín Romo y La Libertad Avanza no solo sorprende, sino que también muestra cómo las promesas de austeridad chocan con la realidad.
Te adelantamos algo: dos nuevos apellidos conocidos acaban de acomodarse en el bloque legislativo.
El diputado bonaerense Agustín Romo, referente de La Libertad Avanza, volvió a quedar en el ojo de la tormenta.
¿El motivo? La reciente incorporación de dos familiares suyos: Juan Cruz Romo y Silvina Iris Romo.
Ambos ingresaron a trabajar en la Legislatura bonaerense, categoría 25, con sueldos que superan los 2 millones de pesos mensuales.
Este nuevo episodio genera más dudas sobre el uso de cargos públicos para beneficio personal, en un momento donde los despidos y ajustes golpean fuerte en el Estado.
Juan Cruz Romo no es nuevo en la vida estatal. Ya figuraba en listados de aspirantes para tareas de portería y cocina escolar en la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, en tiempos de Axel Kicillof.
Su experiencia no está relacionada con la política, sino con servicios básicos en escuelas.
Por su parte, Silvina Iris Romo combina su reciente ingreso al Estado con su rol empresarial. Es presidenta de Cotivo SA, una empresa dedicada a la construcción, administración de propiedades y servicios financieros.
Además, está vinculada a Bienes Raíces Cole SA, una inmobiliaria activa en José C. Paz.
Ambas firmas están inscriptas en ARCA y, si bien no registran empleados actualmente, reflejan un perfil empresarial que contrasta con el discurso de recorte que impulsan desde el espacio libertario.
Este no es el primer escándalo que envuelve a Agustín Romo. En septiembre del año pasado, se filtró que había logrado acomodar a su padre, Carlos Romo, a su pareja, María Valentina Lazbal, y a varios amigos en Trenes Argentinos. Allí, los contratos iban desde los 800 mil hasta los 1.200.000 pesos.
Hoy, tanto Lazbal como Carlos Romo siguen cobrando sueldos de más de 2.5 millones de pesos y también registran contratos municipales en San Miguel.
Otros casos, como los de Agustín Puiggari y Patricio Pantuliano, también siguen vigentes.
Mientras el presidente Javier Milei promete acabar con la "casta", los lazos familiares dentro del Estado no paran de crecer.
Lo que pasa puertas adentro de La Libertad Avanza muestra una distancia cada vez más grande entre el discurso público y la práctica real.