El aumento de los ataques vandálicos en La Plata y la región ha llevado a las empresas Unión Platense y Expreso La Plata a tomar una medida insólita pero necesaria: los micros de las líneas 520 y Este ahora circulan sin ventanillas. Esta decisión responde a la alarmante cifra de 62 unidades vandalizadas desde el 25 de noviembre, mayormente por menores de edad que arrojan piedras contra los vehículos.

El problema no es nuevo, pero la falta de acción por parte de las autoridades ha dejado a las empresas sin opciones. Según un vocero, "no hubo ningún tipo de respuesta", lo que obliga a priorizar la continuidad del servicio frente a los costos insostenibles de reparaciones.

En puntos críticos como Ruta 11 y calle 610, los ataques son constantes. La medida de no reemplazar las ventanillas no solo refleja la magnitud del problema, sino que también busca visibilizarlo. Carteles con la leyenda "unidad vandalizada" ahora acompañan a estos micros, recordando a los pasajeros la precariedad generada por la inseguridad.

El transporte público está en una encrucijada: sin soluciones claras y con antecedentes trágicos como la muerte de un pasajero en 2016, esta decisión extrema debería ser un llamado de atención urgente para que las autoridades actúen antes de que la situación se agrave aún más.