Hace algún tiempo, la Asociación de Jubilados y Pensionados Odontólogos de PBA, se puso al frente del reclamo de miles de profesionales del sector hacia la caja jubilatoria que regula y paga sus remuneraciones previsionales. En definitiva son ellos, los propios afiliados, los que sufren en carne propia uno de los peores karmas de los argentinos: instituciones ricas y afiliados pobres.
Sin embargo, cuando el reclamo ganó la calle y comenzó a esmerilar a la Caja de Seguridad Social para Odontólogos de PBA, liderada por Rosana Asensio (la tesorera del período anterior), la intensidad del reclamo institucional bajó llamativamente, hasta parecerse más a un mero formalismo que a la expresión sindicalizada de una necesidad ineludible y urgente. Por eso, ya son muchos los odontólogos jubilados que sospechan algo raro.
Mientras los profesionales de la boca ya jubilados, cobran apenas algo menos de 92 mil pesos mensuales, los verdaderos “dueños” de la institución (sus jubilados), denuncian ante quien los quiera oir que “los directivos de la Caja ganan sueldos fastuosos, derrochan en gastos administrativos propios de grandes y exitosas empresas, y se dan el lujo impúdico de organizar fiestas pantagruélicas con sus amigos, pagadas con fondos de la CSSOPBA”.
Lo cierto es que la situación de los profesionales bonaerenses retirados de la odontología, está pasando de castaño a oscuro y muchos de ellos están literalmente pasando hambre. Por ello, urge una medida reparadora por parte de quienes conducen la Caja de Odontólogos, a fin de subsanar rápidamente una situación que amenaza con transformarse en el primer gran escándalo de 2024 en el ámbito de la PBA.
GRAVISIMA SITUACION DE LOS JUBILADOS ODONTOLOGOS:
La Asociación de Odontólogos Jubilados PBA realizará, junto a los odontólogos activos y jubilados de distintos distritos del interior, una manifestación en la sede de la Caja para Odontólogos el sábado 13 de enero a las 9:30. En esa oportunidad se tratará el aumento de las jubilaciones que se cobrarán a fin de febrero.
El monto mensual que actualmente se percibe es de $91.890, y fue aprobado en julio de 2023. Desde ese momento a la fecha, la inflación fue del 82,7%, sin contar los índices de enero y febrero que proyectan otro 60%, por lo que el insoportable deterioro de nuestra jubilación es del 142%.
El aumento que propone el Directorio de la Caja, llevaría para febrero el haber a $114.900 o sea el 25,16% de aumento. Eso sería condenar a los que aportaron durante 35, 40 y 50 años, a un estado de indigencia absoluta y vivir de lo que puedan ayudar los hijos y otros allegados. Es por eso que se convoca a esta manifestación pacífica, y en caso de no ser escuchados, se deberán tomar otras acciones.