En la provincia de Buenos Aires, tanto La Libertad Avanza como el PRO atraviesan tensiones internas por la representación y el control de sus marcas partidarias en diversos ámbitos del sistema político local.
Dentro del PRO, las diferencias entre el ex presidente Mauricio Macri y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, han generado la fragmentación de los bloques en la Legislatura bonaerense, lo que ha abierto nuevos frentes de conflicto. Uno de los puntos álgidos se encuentra en el Consejo de la Magistratura de Buenos Aires, donde el diputado Fernando Compagnoni, perteneciente al reciente bloque PRO Libertad alineado con Bullrich, está en el centro de la controversia. El sector liderado por Cristian Ritondo, quien dirigirá el partido a nivel provincial, exige que Compagnoni ceda su lugar a un legislador que no haya abandonado la bancada original del PRO.
Asimismo, la demanda incluye la salida del ex diputado Santiago Nardelli del directorio del Banco Provincia, donde su mandato ha sido extendido por el gobernador Axel Kicillof. Nardelli, un actor clave en la Sexta sección electoral, está ahora bajo presión por parte del PRO de Ritondo, que busca aumentar su influencia en el banco.
Además de estos conflictos, el PRO también pretende recuperar las presidencias de varias comisiones ocupadas por legisladores que apoyan a Bullrich, como las de Derechos del Usuario y Consumidor y de Relaciones Parlamentarias. Desde el bando de Bullrich, argumentan que estos reclamos no tienen fundamento y acusan al PRO CABA de intentar controlar el partido en la provincia.
Similares conflictos se ven en La Libertad Avanza, donde la fragmentación también ha resultado en múltiples bloques dentro de la Legislatura bonaerense. Dos de estos bloques utilizan el nombre Libertad Avanza, aunque uno añade "I" a su denominación. El bloque Libertad Avanza I, compuesto por Florencia Arietto, Carlos Curestis y Joaquín De la Torre, se maneja de manera independiente de las directrices de Javier Milei y su hermana Karina, lo que ha llevado a que esta última busque retirarles el uso del nombre oficial del partido.
El proceso para obtener el control oficial del sello partidario en Buenos Aires se aceleró esta semana con la audiencia presidida por el juez electoral Alejo Ramos Padilla, un paso crucial para La Libertad Avanza de cara a las próximas elecciones. Con la confirmación del control del nombre del partido, se espera que Karina Milei y sus aliados avancen en los reclamos para que los bloques disidentes cambien su denominación.
Alejandro Carrancio, diputado provincial y apoderado del partido, destacó que este avance es esencial para consolidar el espacio que apoya las políticas de Javier Milei y prepararse adecuadamente para los próximos comicios.
Fuente: infobae.com