La economía nacional se encuentra en un proceso de ajuste que afecta de manera diferencial a diversos sectores sociales, según un informe revelador de Moguier Consultora de Estrategia, con más de 30 años de experiencia en análisis económicos. La investigación destaca un cambio drástico en el patrón de consumo de la clase media en los últimos cinco meses, atribuyendo este fenómeno a devaluaciones implementadas por distintos actores políticos.

Uno de los factores clave identificados es la pérdida de poder adquisitivo de los salarios formales reales, estimada en un 10% para diciembre según varias consultoras, incluida Moguier. Esto genera una menor expectativa en la clase media, llevándola a recortar gastos y contribuyendo al círculo recesivo.

Fernando Moiguer, CEO de la consultora, destacó que "venimos de un año como el 2023 en el que la gente, a pesar de las restricciones de ingresos, sentía que tenía que gastar la plata rápido". Sin embargo, con el aumento de la inflación, la percepción ha cambiado drásticamente en menos de 60 días, según Moiguer.

Los rubros más afectados por la disminución del consumo de la clase media son las marcas blancas, carnes, salidas a comer, plataformas de streaming, uso de vehículos y salidas a tomar café, con porcentajes significativos de hogares reduciendo su participación en estos aspectos cotidianos.