Al igual que Alberto Fernández en nación, Axel Kicillof también sufrirá en los próximos meses más de una baja en su gabinete y en el escenario legislativo bonaerense. El caso más relevante es el de Martín Insaurralde, que pidió licencia en la intendencia de Lomas de Zamora después de la derrota legislativa de las PASO y desembarcó como jefe de Gabinete provincial.
Tras coquetear con la idea de la gobernación, ahora Insaurralde analiza junto a su entorno el momento propicio para volver a Lomas de Zamora, el distrito del sur del Gran Buenos Aires que es clave para el kirchnerismo y que maneja políticamente con absolutismo desde hace años. Sería, según trasciende, después del verano.
Se especula que la misma estrategia seguiría Leo Nardini, ministro de Infraestructura bonaerense, en el caso de Malvinas Argentinas. También Gustavo Menéndez, presidente del Grupo Provincia, que dejó la intendencia de Merlo en manos de su hermana Karina.
Hay otros dirigentes que no forman parte del gabinete pero que representan al gobernador en la Legislatura, como Mariano Cascallares, que además es consejero de la Magistratura bonaerense en representación de la Provincia. El intendente de Almirante Brown en uso de licencia sería, según su entorno, el único que garantiza el municipio. José Lepere, viceministro del Interior -de La Cámpora-, con pretensiones locales, deberá esperar al menos otro turno.
Tanto Insaurralde como Cascallares fueron dos de los dirigentes que el pasado miércoles participaron en la cumbre en la residencia del gobernador encabezada por Kicillof y Máximo Kirchner, y que contó, además, con ministros como Andrés Larroque e intendentes como Fernando Espinoza, Federico Achaval, Alberto Descalzo.
También Jorge Ferraresi y Gabriel Katopodis: como oficializó el presidente Alberto Fernández este domingo, el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat volverá a Avellaneda el 1 de noviembre.
En esa reunión, se analizó el escenario bonaerense 2023, y trascendió, como un mantra, la necesidad de “blindar” el conurbano para las elecciones del año próximo.
Por su parte, y de no mediar imprevistos, el gobernador buscará la reelección. Todavía es una incógnita qué hará Cristina Kirchner. Por ahora la Cámpora está enfrascada en un debate interno sobre el futuro de la organización, que atraviesa disidencias entre sus principales referentes: Máximo, Waldo de Pedro y el Cuervo Larroque.