La justicia platense condenó hoy a 12 años de cárcel a la lacra inhumana que fue anotada con el nombre de Miguel David De Boe, por cometer un aberrante abuso sexual que todavía conmociona a Berisso y a toda la Región Capital.
Se trata del inenarrable ataque sexual sufrido por una nena de 10 años de parte de la pereja de su mamá, de quién luego se supo que su negligente accionar podría configurar el terrible delito de "cómplice necesaria para los abusos sexuales cometidos por el hombre con el que convivía en ese momento (De Boe)".
Al enterarse de semejante aberración, el valiente padre de la víctima realizó la correspondiente denuncia policial y judicial, y se cargó la causa al hombro para que no se vanalice el grave atropello a la dignidad que sufrió su hija.
En el largo camino hacia la verdad y la obtención de justicia, el infortunado papá de la menor violada fue amenazado y luego atacado físicamente en varias oportunidades por el victimario, pero nunca detuvo su reclamo, que cristalizó tanto en la justicia como en los medios de comunicación.
El acusado, Miguel David De Boe, de 50 años de edad, está detenido en la mítica cárcel de Sierra Chica, donde los presos jugaron al fútbol con la cabeza de otro detenido y comieron empanadas hechas con carne humana de sus enemigos internos, durante un sangriento y trágico motín. La impactante revuelta carcelaria comenzó el 30 de marzo y culminó el 7 de de abril de 1996. Hubo 8 internos muertos y una jueza tomada de rehén.
El violador recientemente condenado, fue detenido en junio de 2022 en la Plaza Matheu de calle 1 y 66, en La Plata, luego de permanecer prófugo cinco meses, en un operativo efectuado por detectives de la DDI La Plata. Miguel de Boe había sido denunciado en mayo de 2021 por el padre de la menor, visiblemente afectado por la impactante noticia de lo ocurrido con su pequeña hija.
Tras la orden de detenicón, pedida por la fiscal Betina Lacki, un vocero judicial señaló que “el hombre se había dejado la barba y el pelo largo para desorientar a los detectives que lo buscaban”.
El proceso judicial se había iniciado el 29 de mayo de 2021, cuando la nena le contó al padre que la pareja de su mamá la había abusado sexualmente, por lo que ya no quería regresar a esa vivienda.
Con intervención del Gabinete de Delitos Contra la Integridad Sexual de la DDI La Plata, se avanzó en la pesquisa y con el informe del reconocimiento médico y de las pericias psicológicas efectuadas en febrero de 2022 en Cámara Gesell, la justicia pidió la detención del imputado.
Para llegar a que el depravado sexual esté preso, hubo que sortear innumerables artilugios legales interpuestos por la defensa de De Boe, que presentó un pedido de eximición de prisión que le fue denegado por el Juzgado de Garantías 3 y por la Cámara de Apelaciones en lo Penal de La Plata.
"La pareja de su madre la atacó en cuatro oportunidades cuando ella dormía y la obligó a practicarle sexo oral y le efectuó tocamientos en las partes íntimas", reza el escrito judicial al que tuvo acceso PrimeraPágina.info.
El resultado de la Cámara Gesell efectuada por una perito psicóloga de la Suprema Corte, más las conclusiones del reconocimiento médico, fueron definitorios. Para la Justicia, existía riesgo de fuga y de entorpecimientos probatorios. Por eso había pedido una medida privativa de la libertad.
La mamá de la víctima, una mujer misionera de 44 años, también fue denunciada por el padre, bajo sospecha de haber sido cómplice de las vejaciones, en un expediente judicial que llevó adelante la UFI 16 del fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, y este proceso podría terminar con la detención de la progenitora también.
