Un día reapareció en escena el ex ministro de Desarrollo Social y actual diputado nacional, Daniel Fernando Arroyo, para remarcar en una reciente entrevista, algunas pinceladas de sentido común que hoy por hoy no abundan en la política argentina.
En diálogo con Radio Provincia, el actual legislador admitió que dentro Frente de Todos hay discusiones y diferencias y posicionamientos de distintos referentes y posibles precandidatos como en todo espacio político.
Pero con voz firme y valiente aseguró que “las chicanas no sirven de nada cuando el pan está a $600, el litro de leche por encima de los $300 y el kilo de asado cuesta más de $1.600”.
En un exceso de confesiones para estas épocas de parte de un político, Arroyo dijo que "hay un quiebre entre la dirigencia y la sociedad porque ésta percibe peleas sobre cosas que no tienen que ver con las cuestiones que le pasan a las familias”.
De paso, y tras cartón, no tuvo empacho en señalar su pertenencia al Frente Renovador y a su líder Sergio Massa, al señalar que le gustaría que el ministro de Economía se postule y se prepare para la carrera hacia la Casa Rosada porque “sería un gran Presidente porque conoce de energía, de sistema tributario, de política previsional”.