

Por: Jonatan Anaquin
El próximo lunes 8 de julio a las 20.30, Estudiantes se medirá ante Vélez en la final de la Supercopa Internacional, buscando sumar un nuevo título a su historia. El encuentro, que se jugará en el estadio Libertadores de América – Ricardo Enrique Bochini, contará con la dirección arbitral de Darío Herrera y la asistencia del VAR a cargo de Lucas Novelli.
El equipo dirigido por Eduardo Domínguez llega a esta instancia con el objetivo claro de obtener su tercera coronación en este certamen. La expectativa crece entre los hinchas albirrojos, que agotaron rápidamente las entradas populares disponibles, lo que demuestra la fuerte presencia de la parcialidad platense en este tipo de definiciones.
Uno de los aspectos que ha generado mayor discusión en la previa del partido es la modalidad de transmisión. Según lo confirmado, el encuentro será televisado de forma codificada, y sólo podrá verse a través de Disney+, que también gestiona los derechos del fútbol argentino junto a ESPN. Esta decisión ha sido común en las últimas ediciones de partidos definitorios, aunque en esta ocasión se suma la incertidumbre sobre la participación de señales tradicionales como ESPN Premium o TNT Sports.
Cabe recordar que para ver la mayoría de los partidos de la Liga Profesional es necesario contar con el llamado "Pack Fútbol", un servicio adicional al cable tradicional. Sin embargo, en esta ocasión, los derechos de la Supercopa fueron adjudicados directamente al sistema de streaming, lo que obliga a los interesados a tener una suscripción activa en Disney+ si desean ver el partido de forma legal.
Frente a este panorama, quienes no cuentan con suscripciones a servicios pagos comenzaron a buscar otras opciones. Una de ellas es Magis TV, una aplicación que, aunque no está autorizada oficialmente, permite ver canales de televisión –incluso de pago– de forma gratuita desde cualquier parte del mundo. Si bien esta alternativa no es legal, se ha popularizado entre usuarios que desean evitar los costos adicionales que implican las plataformas oficiales.
La proliferación de estas aplicaciones plantea un dilema recurrente sobre el acceso a los eventos deportivos masivos, especialmente en contextos económicos difíciles. Para muchos hinchas, la única posibilidad de seguir a su equipo pasa por estas opciones alternativas.