Una vecina del Berisso denuncia que desde hace más de tres meses no cuenta con servicio de agua potable en su vivienda, ubicada en 162 entre 9 y 10, y que, pese a haber realizado decenas de reclamos, ni la empresa Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA) ni el Municipio de Berisso han brindado una respuesta o solución concreta.
Tatiana, vecina de la ciudad, relató que el problema comenzó el 13 de julio, fecha en la que efectuó el primer reclamo formal ante ABSA. Desde entonces, asegura haber presentado 36 reclamos sin recibir atención técnica ni comunicación oficial.
“Hace varios meses que en mi casa no tenemos agua, directamente nada. Hice varios reclamos formales en ABSA pero nunca obtuve respuesta ni una visita técnica”, expresó.

Según la vecina, los reclamos figuran con carácter “urgente” desde julio, pero el inconveniente continúa. “Nos dicen que no dan bola a los reclamos o que no tienen maquinaria para hacer la reparación, y los únicos perjudicados somos nosotros”, lamentó.
Ante la falta de respuesta de la empresa, Tatiana acudió a la Autoridad del Agua, donde presentó una denuncia formal. Sin embargo, el expediente fue archivado luego de que se notificara a la compañía. “Me pidieron que vaya yo misma a ABSA con la notificación y exija resolución. Hoy ya hice una nota intimándolos junto con la notificación, para ver si logro algo”, contó.
La vecina también se mostró decepcionada por la inacción del Municipio de Berisso, que —según indicó— está al tanto de la situación pero no intervino. “Hablamos con mucha gente, intentamos hacer red para ver si alguien nos puede ayudar, pero queda todo en veremos”, señaló.
Incluso, con una excavación particular, la familia comprobó que el problema no está en las cañerías internas del domicilio. “Directamente no entra agua desde el caño principal”, explicó.
Mientras tanto, siguen sin servicio ni alternativas de asistencia. “Todos los días insistimos, pero no tenemos respuesta. La situación ya se volvió muy difícil de sostener”, concluyó Tatiana, quien decidió hacer público su reclamo con la esperanza de que, finalmente, ABSA o el Municipio actúen.