El proceso de selección de jueces para la Corte Suprema de Justicia de la Nación en Argentina es un procedimiento complejo que involucra al Poder Ejecutivo y al Senado de la Nación. El presidente de la Nación es el encargado de seleccionar a los candidatos, quienes luego deben recibir el acuerdo del Senado para su nombramiento.

Este proceso requiere una mayoría especial en el Senado, con al menos dos tercios de los miembros presentes para dar su aval. Durante este proceso, la ciudadanía tiene la oportunidad de expresar sus opiniones y objeciones sobre los candidatos propuestos, en el marco de un procedimiento de participación ciudadana.

La Corte Suprema de Justicia de la Nación es la máxima instancia jerárquica del Poder Judicial a nivel nacional. Sus decisiones son irrevisables por otros tribunales nacionales, lo que le otorga un papel crucial en la protección y promoción de los derechos y garantías de los habitantes del país, así como en el sistema de división de poderes.

Actualmente, la Corte Suprema de Justicia cuenta con cuatro jueces ocupando sus lugares. Sin embargo, existe una vacante que el Gobierno de Alberto Fernández aún no ha propuesto candidato para ocuparla. Esta situación genera preocupación sobre la composición y funcionamiento del tribunal.

El procedimiento para la selección de jueces está regulado por la Constitución Nacional y diversos decretos presidenciales, que establecen requisitos tanto formales como sustantivos para los candidatos propuestos. Además, se prevén mecanismos de participación ciudadana y consulta a diversas organizaciones y entidades relevantes en el ámbito profesional, judicial, académico y social.

En resumen, el proceso de selección de jueces para la Corte Suprema de Justicia en Argentina es fundamental para garantizar la independencia y calidad del Poder Judicial, así como para asegurar la representatividad y diversidad en la composición del tribunal, en línea con los principios democráticos y de Estado de Derecho.

Fuente: infobae.com