Luego de 40 años de cautiverio, liberan al tortugo "Jorge": desde Pehuajó, Manuelita festeja emocionada

25-10-2022 - Por Primera Página

Hace casi 40 años, el tortugo "Jorge" permanece en cautiverio en la provincia de Mendoza y esta semana será trasladado a la localidad bonaerense de Mar del Plata para realizar rehabilitación y reinsertarse a su hábitat natural.

Se trata de un operativo que sucederá en estos días, a través de un vuelo privado en el que viajará el intendente de la ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez. El animal será llevado al Centro de Rehabilitación de Fauna Marina (CRFMA) del Aquarium de Mar del Plata, donde estudiarán las posibilidades de reinserción.

El tortugo tiene entre 65 y 72 años, pesa 99 kilos, y vive en un estanque de 20.000 litros de agua. Ya en la localidad de la provincia de Buenos Aires, cumplirá una etapa de adaptación en un estanque acondicionado de 120 mil litros y será colocado en una laguna natural de dos hectáreas situada en la misma zona.

Profesionales de biología marina evaluarán cómo se desenvuelve el tortugo durante un tiempo determinado y analizarán si es seguro que el espacio sea compartido por otras especies de agua dulce. Así, se evaluará su vuelta a la naturaleza. Según informaron las autoridades de Mendoza, en este momento "se encuentra en óptimo estado de salud".

Fue encontrado hace 40 años en la región bonaerense, lo derivaron a Mendoza y ahora llegará a Mar del Plata a realizar rehabilitación. Conocé al tortugo Jorge.


La historia del tortugo Jorge


Jorge fue rescatado por pescadores en 1984 en una playa cercana a Bahía Blanca, localidad del sur de la provincia de Buenos Aires. En aquel entonces se encontraba herido y entumecido por el frío. Fue el Instituto Oceanográfico Argentino quien identificó que se trataba de un Caretta-Caretta, una tortuga tropical común de mares cálidos pero inusual en el Mar Argentino.

Como la devolución de este tipo de animales a medios muy fríos no se aconseja para la especie, no se consideró devolverlo al mar. Y es que el tortugo corría riesgo de fallecer por causas fisiológicas y/o mecánicas, como asfixia.

En aquel año, el exacuario Municipal de Mendoza era el único capaz de recibirlo, por lo que el animal fue enviado el 4 de marzo de 1984, pesando en ese momento 40 kilos.