Un incidente impactante ocurrió en Brasil durante un partido de fútbol de la segunda división del Campeonato Goiano entre Grêmio Esportivo Anápolis y Centro Oeste. Después del encuentro, una pelea entre los equipos llevó a la intervención de la policía militar. En medio de la confusión, un policía disparó una bala de goma que alcanzó al arquero del Grêmio, Ramón Souza, hiriéndolo en la pierna.

El jugador recibió atención médica inmediata en el campo por parte del cuerpo médico del equipo. A pesar del incidente, se informa que Souza está fuera de peligro. El club emitió un comunicado contundente repudiando el incidente, calificándolo como "lamentable, ridículo y repugnante", y anunciando que tomarán acciones para que el responsable sea llevado ante la justicia.

Este incidente ha generado una gran consternación y preocupación en la comunidad deportiva, subrayando la importancia de la seguridad e integridad en eventos deportivos.