No se sabe exactamente cuándo empezó el proceso de deterioro, pero todos coinciden en que fue lento y progresivo. Las butacas de madera blanca se volvieron negras, mostrando su podredumbre interior. El escenario, el único sector cubierto, se llenó de filtraciones que fueron dañando el piso, también de madera. Y sobre el techo crecieron plantas, de todo tipo, con raíces cada vez más arraigadas a la estructura.
p>Así, de a poco, el antiguo anfiteatro Martín Fierro, conocido como Teatro del Lago, fue perdiendo su esplendor. Desde su inauguración, en 1949 -Perón y Evita estuvieron presentes-, su escenario había recibido a elencos y compañías de todo tipo: desde orquestas sinfónicas de envergadura hasta artistas como León Gieco y Fito Páez. Pero, con el cambio de siglo, el nivel artístico que lo caracterizaba fue quedando en el olvido, y la ajustada agenda del lugar empezó a dilatarse. Para 2011, abría casi únicamente para grabar un programa de televisión semanal. Hasta que en 2012 su telón se cerró por última vez.“Se decía que el teatro tenía peligro de derrumbe, pero no era así. En verdad, fue por el accidente que hubo. Un obrero quiso arrancar un tronco que salía del techo, se vino abajo con un pedazo del techo, y falleció. Eso dio la excusa para cerrarlo por no estar en condiciones”, explica Martiniano Ferrer Picado, secretario de Cultura y Educación de La Plata.
<El teatro quedó abandonado. Hubo usurpaciones, ocupas y principios de incendio. También, protestas vecinales, pidiendo al gobierno local el reacondicionamiento del teatro, emblema de la ciudad de La Plata. Las obras de puesta en valor empezaron hace dos años, pero quedaron suspendidas por un conflicto judicial, aún irresuelto.
El anfiteatro Martín Fierro fue fundado en noviembre de 1949, sobre la isla del Paseo del Bosque. Antes, había otro teatro allí, pero fue demolido para poder erigir el primer “teatro al aire libre de la ciudad”. Su ceremonia de inauguración, que fue parte de los festejos del 67° aniversario de fundación de la ciudad, contó con la presencia del entonces presidente, Juan Domingo Perón, y su esposa, Eva Duarte, que desde la primera fila presenciaron numerosos bailes y una ópera.
Según fuentes provinciales, la idea principal del gobierno provincial era que este nuevo escenario funcionara como un apoyo, un anexo, del Teatro Argentino de La Plata, el segundo coliseo más importante del país, solo superado por el Colón. Décadas más tarde, cuando este teatro se incendió, en 1977, el Teatro del Lago empezó a absorber mucha de su programación. Su esplendor se extendió a lo largo de las décadas, convirtiéndose en un emblema histórico y cultural de la ciudad.
Desde hace 6 años que distintos gobiernos provinciales y municipales prometen la reapertura del lugar. La primera tentativa la tuvo María Eugenia Vidal en marzo de 2016, pocos meses después de haber asumido la gobernación de la provincia. En ese momento, la funcionaria había acordado con intendente de La Plata, Julio Garro, también de Cambiemos, la inversión provincial para la puesta en valor del Teatro del Lago.
En una conferencia donde los dos funcionarios estaban presentes, el entonces ministro de Gestión Cultural de la Provincia, Alejandro “Conejo” Gómez, prometió: “Entre 2016 y 2017, habrá 100 millones para ponerlo en funcionamiento”. Sin embargo, las tareas de remodelación prometidas no se licitaron ni se iniciaron. Y el abandono del teatro perduró durante tres años más, hasta que en 2019, meses antes de ser reelegido como intendente, Garro se hizo cargo de la obra.
La puesta en valor empezó en 2020, luego de que el cateo realizado el año anterior comprobara que el edificio no tenía riesgo de derrumbe, afirman desde el municipio. Se suponía que la obra iba a finalizar en marzo de 2021. Pero hoy, casi un año después de la fecha estipulada, el anfiteatro continúa cerrado, con la entrada tapiada y las persianas del escenario bajas.
¿Qué pasó? ¿por qué el teatro no abrió? Según fuentes municipales, se debe a un conflicto judicial con la Provincia, que argumenta que el teatro es parte del patrimonio provincial y, por lo tanto, no es propiedad del municipio.
“Para noviembre de 2020, habíamos terminado la primera fase de la obra y el teatro ya estaba funcional al 100%. Le faltaban detalles mínimos, pero ya podía abrir. Entonces, hicimos un streaming ahí para celebrar el 138 Aniversario de la ciudad de La Plata, el 19 de noviembre. Se intentó mostrar todo el teatro, con artistas platenses. Y al poco tiempo de eso, la Provincia nos pidió el desalojo”, detalla Ferrer Picado.
“Nosotros presentamos los papeles que demuestran que el Teatro del Lago es parte del patrimonio municipal. Pero, por ahora, el tema está paralizado en instancia judicial con una medida de no innovar”, afirma el funcionario. Hasta que no haya una definición en la justicia, el gobierno local no puede proseguir con las obras ni planificar nuevos trabajos, más allá del propio mantenimiento.
La discusión de base es que los dos gobiernos, el municipal y el provincial, dicen ser los propietarios del anfiteatro. La intendencia, a cargo de Garro, presentó ante la justicia un compilado de leyes y resoluciones históricas que comprueban su postura.
“Históricamente, el imaginario popular pensó que el teatro era de la Provincia. Pero en 1959, la Provincia le cedió al municipio el palacio municipal y todo el paseo del bosque, donde está el anfiteatro, la cancha de Estudiantes, de Gimnasia y Esgrima, el zoológico, con excepción de las propiedades que ya habían sido cedidas previamente por la Provincia, como la Universidad Nacional de La Plata, el Museo de La Plata, el Colegio Nacional, el observatorio. En el 87, el concejo deliberante aprueba esa ley y pide que se ponga a nombre de la municipalidad esas propiedades”, explica Ferrer Picado. Y agrega: “Es más, cuando Gimnasia y Estudiantes tuvieron que hacer la obra, la municipalidad tuvo que cederles el terreno para que pudieran hacerlas”.
Por su parte, la Provincia aboga que el teatro siempre fue parte del patrimonio de Buenos Aires. “El Teatro del Lago es de los platenses porque es de la Provincia de Buenos Aires. Así fue siempre. Se ha planteado un falso debate y el municipio provocó un litigio, con argumentos débiles, que impide que podamos invertir para recuperarlo”, afirman fuentes del gobierno a cargo de Axel Kicillof. Y suman: “Lo único concreto es que hace 6 años que Julio Garro es intendente, cuatro con María Eugenia Vidal como gobernadora, y el Teatro del Lago sigue abandonado. Sigue cerrado y así pasó un año más”.
Mientras se define la tenencia en la Justicia, el teatro sigue cerrado, y, a través de las redes, los vecinos se quejan y preguntan cuándo van a poder disfrutar nuevamente de los tan añorados recitales y conciertos al aire libre.
Según Ferrer Picado, el teatro volverá a brillar cuando se resuelva la cuestión judicial y se reanuden las obras. La primera fase de la puesta en valor ya está terminada. Esta incluyó el arreglo de los motores, la impermeabilización del techo y la restauración de las butacas. También se cambió el piso del escenario y se arreglaron los baños y los camarines principales.
Dependiendo el ángulo desde donde se lo mire, el teatro parece restaurado o abandonado. Eso tiene que ver con las fases de la obra, explica el funcionario. Por ahora, solo se avanzó con la puesta en valor de los sectores que son imprescindibles para la apertura del teatro. La idea es proseguir con el resto de los arreglos una vez que este esté funcionando.
“La segunda fase sería el embellecimiento del lugar, terminar de darle el color a nivel eléctrico y mejorar los baños, las oficinas y los talleres del teatro. Son todos temas secundarios para el funcionamiento del teatro”, explica. Fuentes: lamovidaplatense.com y lanacion.com.ar