Durante la noche del lunes, la policía encontró en una casa en Munro el cuerpo de Beatriz Mansilla, una jubilada de 80 años. Estaba atado de pies y manos a una silla y su casa tenía signos de estar revuelta, aunque la entrada no estaba forzada. Por este motivo, la policía cree que alguien de su entorno o familia la mató.

La mujer había sido vista con vida por última vez en la madrugada del lunes, cuando su hijo dejó la vivienda. Cuando fue hallada, todavía vestía un camisón. Aunque la casa estaba desordenada, todas las pertenencias de la anciana seguían estando allí, por lo que todo indica que no fue un robo.

Ahora, la Justicia investiga si se trató de un ajuste de cuentas, ya que posiblemente Mansilla conocía a las personas que ingresaron en su hogar.

La causa está intervenida por la Fiscalía Oeste, que está a cargo del Dr. Alejandro Musso. Actualmente, se están analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona.

A pesar de que aún se desconocen los resultados de la autopsia, fuentes policiales confirmaron que la víctima no tenía golpes, pero sí señales de estrangulamiento que se podían notar a simple vista. Fuente: infobae.com