El bloque de concejales de Juntos por el Cambio de Berisso denunció que, una vez más, un funcionario del intendente Fabián Cagliardi recibió la vacuna contra el coronavirus. Se trata de la secretaria de Gobierno municipal, Aldana Iovanovich, quien no es persona de riesgo y no realiza actividades esenciales.
p>La noticia se suma al escándalo que se desató este fin de semana, luego de que saliera a la luz que el jefe comunal permitió que se lleve a cabo un casamiento en el cuartel de Bomberos Voluntarios, en plena pandemia y a través de un decreto que él mismo firmó.“Es un absurdo. Hay muchísimos adultos mayores esperando recibir la primera dosis de la vacuna y también efectivos de la Policía que están todo el día expuestos. No tiene sentido”, dijo la concejala de Juntos por el Cambio de Berisso, Silvina Di Renta.
En ese sentido, reveló que es la segunda vez que un funcionario de Cagliardi se vacunó “indebidamente”. El caso anterior se había dado en febrero, cuando el coordinador de la Oficina de Empleo de la Comuna, Javier Ibarra, recibió la dosis sin que le correspondiera por edad ni por actividad.
En aquel momento, los ediles de Juntos por el Cambio reclamaron su desplazamiento, pero el funcionario fue confirmado en su cargo por Cagliardi.
En cuanto al casamiento, la concejala contó que su bloque realizó un pedido de informes en el deliberativo. “La celebración se autorizó en el marco de una excepción dentro de una normativa que la prohibía, en un contexto de fuerte alerta epidemiológica en el que todos los salones y muchas personas están esperando el momento adecuado para poder celebrar”.
En un primer momento, las acusaciones habían recaído sobre Roberto Scafati -director de Defensa Civil de la Comuna-, a quien los vecinos señalan como organizador del evento. Sin embargo, el funcionario las negó y explicó que se trató de un casamiento que se llevó a cabo bajo estrictos protocolos.
“La pareja tenía toda la mercadería comprada, el catering, los invitados. Así que decidimos habilitarla excepcionalmente con un protocolo estricto que yo mismo supervisé”, explicó Scafati a este medio y descartó haber asistido al lugar como invitado, sino para corroborar que las medidas se cumplieran al pie de la letra.
Pero el escándalo, que tuvo varias denuncias de vecinos al área de Control Urbano, sumó un nuevo capítulo. Es que el propio Cagliardi admitió haber sacado un decreto “para hacer por única vez para hacer una fiesta en ese lugar”.
“Le hacíamos un daño terrible a la familia y no veíamos riesgo de contacto, todos iban a bailar al lado de las mesas y todo eso lo supervisó Roberto (Scafati)”, justificó de manera increíble el mandatario en declaraciones radiales.
Y agregó: “Una cosa es suspender una fiesta 48 horas antes y otra diez días cuando no se compró nada. Acá estaba todo comprado, el servicio de lunch contratado y no le devolvían la plata ni dejaban pasar la fiesta”.
La denuncia había sido elevada por el Foro Vecinal de Seguridad 2, del barrio de Los Talas. Fueron vecinos de la zona de la sede de Bomberos, los que comprobaron que en el primer piso se realizaba una fiesta de casamiento y en las inmediaciones del cuartel había estacionada una importante cantidad de vehículos. Fuentes: lamovidaplatense.info y 0221.com