Obispos de la provincia de Buenos Aires le pidieron al gobernador Axel Kicillof que analice la posibilidad de ampliar el límite de 10 personas para las celebraciones religiosas al aire libre. El reclamo lo inició el arzobispo de La Plata, Monseñor Víctor Manuel Fernández, ante el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, al señalarle que esa restricción es “muy abusiva y completamente desproporcionada”.
p>El pedido de Tucho Fernández se difundió a través de una carta y recibió el de los líderes de las principales diócesis del Conurbano, incluido el de San Isidro, Oscar Ojea, quien también es presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), máxima autoridad de la Iglesia Católica en el país.En el texto, Fernández aseguró que siempre realizó “enormes esfuerzos para acatar y explicar” las decisiones sanitarias en el marco de la pandemia del coronavirus, pero remarcó que se “supone” que debe tratarse “de medidas racionales”. Y agregó que las misas ya se estaban haciendo al aire libre, con un máximo de 20 creyentes por vez y “con distancias de más de dos metros entre personas o burbujas”, lo que ya los obligaba a organizarlas “en diferentes horarios” para “cubrir mínimamente la demanda”, por lo que advirtió que “tensar tanto la cuerda no ayuda”.
“Reducir ahora ese número para la Fase 2 y aún para la 3, a sólo 10 personas, nos parece a todos muy abusivo y completamente desproporcionado. Y esto se plantea no desde el punto de vista de la fe, sino desde la misma evidencia racional. Nos parece extraño que se considere un culto religioso más peligroso que una actividad deportiva”, sostuvo.
Para argumentar su postura, Fernández manifestó que estos encuentros son “actos muy estáticos”, en los que “la gente no se mueve, no hablan entre sí, no se toca, no hay interacción, mientras que “en un partido de futbol, en cambio, hay contacto, cercanía interpersonal, se tocan, se gritan, se respiran encima, y los riesgos son claramente diferentes”.
“No pedimos que se consideren los actos del culto desde el punto de vista de la fe. Pero con una mirada meramente humana se advierte que 20 o 30 personas a dos metros de distancia en una misa al aire libre no tienen riesgo de contagio”, opinó.
En esta línea, el arzobispo de La Plata agregó que “aún los grupos de personas que se juntan a merendar en una plaza, tienen mucho mayor contacto”, por lo que les pidió a las autoridades provinciales “obrar de manera realmente razonable y científica”. “Lo racional sería distinguir los actos de culto de otros tipos de reuniones, y habilitar un número mayor de personas que haga que la norma sea realmente practicable”, finalizó la carta que le llegó las autoridades bonaerenses.
Más tarde, adhirieron a la carta de Monseñor Fernández varios de los obispos del Conurbano, quienes también le pidieron al gobernador Kicillof revisar la medida “desproporcionada de poder contar tan solo con 10 personas al aire libre para la Celebración del Culto”.
“Así mismo, solicitamos de manera formal dialogar para discernir una mayor apertura en las celebraciones en este tiempo de tanta necesidad, no solo de la salud física, sino también espiritual de nuestro pueblo bonaerense”, agregaron los líderes religiosos en un breve comunicado. Fuentes: lamovidaplatense.info y 0221.com.ar