Benjamín tiene 2 años, es de Mar del Plata y junto a su papá y su mamá llegó a la ciudad de las diagonales paras ser atendido tras sufrir mala praxis en su ciudad natal. Una vez internado, le diagnosticaron leucemia y la vida de la familia dio un vuelco rotundo.
p>Como contó a LAPLATA1.com Ángel Mansilla, papá del chiquito, mientras estaba en su ciudad natal tuvo nueve diagnósticos diferentes en 17 días. “Nos dijeron que tenía un virus raro por una planta, después que era tuberculosis, el virus de un gato. Todo distinto y nada de eso era real”.
Allí fue cuando decidieron pedir su traslado al hospital Sor María Ludovica de La Plata, pero “hubo manejos raros” y no lo trajeron hasta después de pasar por trabas burocráticas que duró un día entero.
“En el camino tuvo dos paros respiratorios, llegó con los minutos contados. Todo eso fue el año pasado. En Mar del Plata no le diagnosticaron nada, sino una vez que llegamos. Ese día no me lo olvido más, enseguida lo empezaron a atender y con mi mujer no lo podíamos ver por la cantidad de médicos que tenía alrededor”, explicó.
Ángel dijo que no tiene más que “palabras de agradecimiento con esos profesionales desde que llegamos a La Plata”, quienes además se encargaron de proveerle los medicamentos que necesitaba, ya que la obra social brilla por su ausencia.
“La obra social nos dijo que no se hacía cargo porque la enfermedad era preexistente, pero luego nos explicaron que sí debían hacerlo. Tenemos hasta la receta, y la medicación oncológica es carísima. Está con Evermin Metotrexato 10mg, Marcaptopurina 50mg. Incluso tuve que ir a buscar cuatro cajas que nos donaron, porque la gente se mueve más que la misma obra social”, dijo.
Por ahora tienen sólo para treinta días, pero en realidad el tratamiento seguirá por dieciocho meses más. “Venimos pagando todo nosotros, traslados, comida, todo. Vendimos hasta un campo para poder bancar la medicación y el tratamiento”, contó.
Benjamín tenía un año y un mes cuando todo comenzó, y hace algunos días cumplió 2. Sus papás están preocupados porque el tipo de leucemia que tiene su hijo es extraño y está en estudio en el hospital de Niños, en el Garrahan y en Favaloro.
“El primer caso en el hospital de ese tipo fue hace 8 años, y perdieron al chiquito. El segundo caso es Benjamín. Es muy duro, el grado de quimio normal es de 2,3 pero con Benja empezaron con 7,2 y terminó con 13,15 o sea que es muy agresivo el tratamiento”, contó su papá.
Es por eso que necesita los medicamentos sí o sí y con urgencia, para seguir luchando por las ganas de vivir y de compartir con su familia una vida digna.
Fuentes: lamovidaplatense.info y laplata1.com