El bloque de concejales del Frente de Todos sorprendió en la sesión obstruyendo la aprobación del pedido de prórroga para la presentación del Presupuesto 2022 que el intendente Julio Garro había elevado en las últimas horas. La movida, leída en clave política y en medio del tramo final de la campaña electoral, tensa al extremo la convivencia en el cuerpo deliberativo local, donde se rompió una práctica que suele ser habitual.  

Más allá de las consecuencia concretas que tenga el incumplimiento de ese plazo legal, lo ocurrido expuso en el recinto cierto malestar entre ambos bloques. El argumento formal del rechazo opositor fue el de rediscutir los procedimientos a través de los cuales se elabora y ejecuta el Presupuesto, con el reclamo explícito de la presencia de los funcionarios intercambiando en las reuniones de comisiones. Pero por lo bajo, fuentes de la bancada del Frente de Todos admitieron la tensa relación que existe con el oficialismo y especialmente con la Presidencia del cuerpo.

Los pasos a seguir a partir de ahora son de doble interpretación según a quién se le consulte. Mientras la oposición considera que al no aprobarse la prórroga el intendente queda en falta con el Tribunal de Cuentas y por eso debiera forzarse una aprobación por mayoría simple en una sesión especial antes del 31 de octubre, en el oficialismo coinciden en que eso no es necesario ya que el Ejecutivo ya cumplió con los pasos legales al enviar el pedido antes de que esa fecha y que alcanzará con que se vote en la primera sesión ordinaria de noviembre.

En el recinto, quien mostró el malestar por el no acompañamiento del Frente de Todos fue el presidente del bloque de Juntos por el Cambio, el radical Claudio Frangul. "No entendemos por qué no estamos votando este pedido del Ejecutivo, porque es una cuestión de técnica que siempre es acompañada por unanimidad y en el momento. Me llama la atención", dijo. Y recordó que la Municipalidad se ve obligada a postergar la presentación porque aún no hay pauta presupuestaria provincial en base a la cual el equipo económico local pueda calcular los recursos con los que contará el año próximo.

La respuesta fue a través del peronista Guillermo "Nano" Cara, quien justificó la decisión del Frente de Todos de no acompañar la prórroga con la "necesidad de acordar pautas de discusión con e Ejecutivo respecto de la elaboración del Presupuesto y su ejecución posterior, para que el Concejo Deliberante no se convierta en la Secretaría número 22 como parece pretender el intendente Garro".

"Queremos poder escuchar cuáles son las causas por las cuales se hacen las modificaciones a los Presupuestos durante todos los años desde que Garro es intendente", explicó Cara después de la sesión. Y agregó que "el oficialismo nos pide que acompañemos pero sin habilitar ese tipo de discusiones", dijo. Y recordó que 2020 el Frente de Todos acompañó una prórroga a las sesiones ordinarias a cambio de que los funcionarios subieran al Concejo a explicar la rendición de cuentas, "cosa que finalmente no ocurrió". 

Y cerró: "Verdaderamente este Concejo se está convirtiendo en una oficina más del Ejecutivo y eso significa un destrato no a nuestra bancada sino a la democracia, que es lo que representa el deliberativo".

Para el bloque opositor, no contar con la prórroga aprobada antes del 31 de octubre deja en falta al intendente ante el Tribunal de Cuentas, por lo que necesitaría recurrir a una sesión especial donde podría votarla con mayoría simple. En el oficialismo creen los contrario y aseguran que el intendente ya cumplió elevando el pedido de prórroga en tiempo y forma.

El radical Frangul justificó el pedido de prórroga con los mismos términos que lo hizo el intendente en su elevación: "Aún no hay pauta presupuestaria del gobierno provincial, la cual resulta necesaria para la elaboración de los presupuestos locales". Fuentes del oficialismo indicaron que el contexto obliga a esperar para elaborar y presentar el Presupuesto en base a números certeros. Fuentes: lamovidaplatense.com y 0221.com.ar