La Patagonia vuelve a dar un extraordinario registro de un saurópodo titanosaurio. Hasta ahora no se conocían estos gigantescos cuadrúpedos con una antigüedad superior a los 120 millones de años, por lo que el hallazgo de Ninjatitan zapatai tiene una gran relevancia para el conocimiento de la historia evolutiva de este grupo y del Cretácico Inferior.
p>El doctor Pablo Gallina, investigador de la Fundación Azara en la Universidad Maimónides y del CONICET, indicó a la Agencia CTyS-UNLaM que “la mayor importancia de este fósil, más allá de que es una nueva especie de titanosaurio, es que se trata del registro más antiguo a nivel mundial para este grupo”.“Este descubrimiento es muy importante también para el conocimiento de la historia evolutiva de los saurópodos, porque los registros fosilíferos de comienzos del Cretácico, hace unos 140 millones de años, son realmente muy escasos en todo el mundo”, indicó el autor principal del estudio publicado hoy en la revista científica Ameghiniana.
Respecto al hallazgo de Ninjatitan en la Formación Bajada Colorada, al sudeste de Neuquén, el doctor Juan Ignacio Canale, investigador del Museo Municipal de Villa El Chocón y del CONICET, afirmó que “en el año 2014, el técnico Jonatan Aroca realizó el primer hallazgo de una escápula muy completa de este animal y ahí notamos que se trataba de un descubrimiento muy importante y preparamos todo para poder seguir trabajando el año siguiente en ese estrato”.
“En la siguiente campaña, aparecieron tres vértebras y algunos huesos de sus patas traseras; una parte del fémur y lo que sería su peroné”, precisó Canale. Y agregó: “Ahí comenzó la preparación de los materiales en el Museo de Villa El Chocón. Hasta ese momento, sabíamos que se trataba de un saurópodo, pero al realizar el estudio detallado de las relaciones filogenéticas, de las relaciones de parentesco de este animal con otras especies conocidas, es que nos dimos cuenta que pertenecía al grupo de los titanosaurios, por lo que la importancia de este descubrimiento era aún mucho mayor de lo que habíamos imaginado en un comienzo”.
El doctor José Luis Carballido, investigador del Museo Egidio Feruglio y del CONICET, fue quien se encargó específicamente del análisis de estas relaciones filogenéticas. “Los doctores Pablo Gallina y Juan Canale me contactaron ya con los materiales preparados y con la idea acabada de que se trataba de una nueva especie que estaría muy probablemente relacionada con los titanosaurios, pero faltaba terminar de resolver donde se ubicaba Ninjatitan dentro de la evolución de los saurópodos”.
“A priori, por la antigüedad de este material, de 140 millones de años, se podía suponer que se trataba de una forma previa al origen de los titanosaurios, porque en la Patagonia solo de conocen titanosaurios de menos de 120 millones de años antes del presente”, afirmó Carballido.
Pero el estudio reveló que Ninjatitan zapatai se trataba de un titanosaurio, por lo que pasaba a ser el más antiguo del mundo con decenas de millones de años de diferencia. “Este análisis filogenético se realizó con un amplio muestreo no solo de formas de titanosaurios, sino también de formas cercanas y más basales al origen de los titanosaurios”, indicó el investigador del MEF.
“Con este resultado final de que Ninjatitan formaba parte de la familia de los titanosaurios, se hizo mucho más importante este descubrimiento, porque no solo representa a la especie más antigua de titanosaurio, sino que nos permite conocer mucho más sobre el origen de este grupo”, valoró el doctor Pablo Gallina.
Ninjatitan representa un nuevo shock, un nuevo golpe al conocimiento sobre los titanosaurios. Y se suma al equipo de los titanosaurios de la Patagonia que han asestado fuertes apariciones en los últimos tiempos: en 2017, se dio a conocer al titanosaurio más grande del mundo, Patagotitan mayorum, oriundo de la provincia de Chubut; y, hace pocas semanas, se dio a conocer el hallazgo de otro titanosaurio en la provincia de Neuquén que incluso podría superarlo en tamaño.
Ninjatitan da así un nuevo golpe. Sin embargo, su nombre no tiene ningún tipo de vinculación a los movimientos que podía realizar en vida y, desde luego, este herbívoro cuadrúpedo no contaba con habilidades para el desarrollo de un arte marcial. Su nombre fue dado en reconocimiento al investigador argentino Sebastián Apesteguía, apodado como “El Ninja” desde sus inicios en la paleontología.
“Sebastián Apesteguía fue quien tuvo la idea de ir a la localidad Bajada Colorada en 2010, a partir de una recomendación del geólogo Hector Leanza, debido a la extensión del sitio y sus características geológicas, pero que nadie había visitado en busca de vertebrados fósiles”, relató el investigador Canale.
Actualmente, Pablo Gallina y Juan Canale dirigen las investigaciones en dicha formación, pero el doctor Apesteguía siempre tienen participación en el trabajo de campo y en el estudio de los materiales que de allí provienen. Canale destacó que “es un enorme paleontólogo que ha trabajado muchísimo en diversos yacimientos, con una amplia trayectoria en la paleontología y en la divulgación de la ciencia y, por ello, también nos pareció muy justo dedicarle esta especie a él”.
En tanto, el nombre específico de la especie –zapatai-, está dedicado a Rogelio Zapata, técnico del Museo de Villa El Chocón desde mediados de la década del 90 y partícipe en todos los trabajos de campo que se realizaron en Bajada Colorada desde 2010.
La Formación Bajada Colorada pertenece al comienzo del período Cretácico, el cual se inició tras la extinción con la que se marca el final del Jurásico. “El cambio de períodos geológicos siempre está marcado por grandes extinciones, pero, puntualmente, los grupos de dinosaurios de los cuales surgirían los titanosaurios no se vieron afectados por este cambio; de hecho, hay titanosauriformes desde el Jurásico Superior, como los braquiosaurios o sus parientes que pasaron sin problema ese límite, tanto en lo que es actualmente Argentina como en otras partes del mundo”, explicó el paleontólogo Gallina.
Durante la historia evolutiva, el grupo de los saurópodos tuvo distintos momentos, distintos pulsos de gigantismo, los cuales no solo estuvieron relacionados al grupo de los titanosaurios. En este sentido, el doctor Gallina ejemplificó que “hubo grandes animales hacia finales del Jurásico, como el Apatosaurus y el Brachiosaurus; y, ya en la línea de los titanosaurios, el pulso con los mayores gigantes se produce hacia mediados del Cretácico, con especies como el Patagotitan, el Argentinosaurus y el Notocolossus".
En Bajada Colorada, se puede observar el principio del período Cretácico, un momento de la historia evolutiva del cual no se cuenta con muchos registros. Por ello, los investigadores que trabajan allí destacan que cada cosa nueva que encuentran es absolutamente novedosa. “Allí, hemos encontrado también distintos grupos de dinosaurios carnívoros y otros grupos de dinosaurios herbívoros”, mencionó el investigador de la Fundación Azara y del CONICET.
A partir del hallazgo de Nijatitan zapatai y de su estudio publicado en la revista Ameghiniana bajo el título “The earliest known titanosaur sauropod dinosaur”, se refuerza la idea de que los titanosaurios tuvieron un origen gondwánico -en el supercontinente del sur conformado por lo que es actualmente Sudamérica, Africa, la India, Australia y la Antártida-. Previamente, se había planteado el origen gondwánico para este grupo desde la teoría, pero, a partir de este descubrimiento, se cuenta con material que sustenta dicha idea.