Por iniciativa y loable esfuerzo del abogado ensenadense Fernando Monticelli, que trabaja en el tema desde el año 2006, la Justicia Federal intimó al gobierno de Axel Kicillof y a los municipios de La Plata, Berisso y Ensenada, a concretar urgentes medidas tendientes a consolidar el saneamiento del Arroyo El Gato, que desemboca en el Río Santiago y pasa de inmediato al Río de la Plata, que presenta una colección completa de daños ambientales por contaminación desde hace años.

En una ejemplificadora medida cautelar dictada por el juez federal en lo Civil, Comercial y Contencioso Administrativo N° 4, Alberto Recondo, el magistrado ordena en carácter de urgente al gobierno provincial y a la Municipalidad de La Plata, que coloquen barreras de contención flotantes sobre el curso de ese riacho que deambula durante decenas de kilómetros en modo cloaca a cielo abierto, en un plazo de 60 días a partir del 25 de noviembre pasado.

También, el fallo judicial ordena que se notifique fehacientemente al Juzgado N° 4 sobre los resultados de esos trabajos, al tiempo que intima a los organismos intervinientes a que presenten un plan de saneamiento integral para el tratamiento de los residuos cloacales de La Plata, Berisso y Ensenada, los que desde hace años se vierten en su cauce sin el tratamiento adecuado.

El juez federal Recondo pide al gobierno de Kicillof y a su empresa estatal mixta denominada ABSA (Aguas Bonaerenses Sociedad Anónima), a que presenten ante su Juzgado “un plan provisorio para evitar los efectos perjudiciales del vuelco de líquido cloacal sin tratamiento, en el sistema compuesto por el Arroyo El Gato, el Río Santiago y Río de la Plata”.

Cabe destacar que el Arroyo El Gato es uno de los cinco cauces de agua que atraviesa a la enorme y bellísima ciudad capital de la principal provincia del país, en sentido oeste-este. “En ese lugar tiran desde restos domiciliarios y gomas, hasta heladeras y otros desechos”, aclaró el juez Recondo.

El abogado Monticelli, un luchador incansable e insobornable por los derechos ambientales de esa región, logró que seis meses atrás, la Clínica Jurídica de Derecho Ambiental de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNLP iniciara un planteo por el deterioro ambiental de la zona, en el fuero Federal. 

El ambientalista, que vive muy cerca de la desembocadura del Arroyo El Gato en el Río Santiago, en la zona del Club de Regatas La Plata, aportó bibliotecas llenas de testimonios y pruebas presentados por gran cantidad de vecinos afectados. Allí abundan estudios, informes y relevamientos, que constatan clara y contundentemente el deterioro del mencionado curso de agua y los riesgos que implica semejante sacrilegio ambiental para casi un millón de habitantes de esa región (el Gran La Plata).

El juez se puso práctico y recorrió la zona en cuestión, luego de lo cual precisó: “hay un daño comprobado. Lo pude constatar en el lugar. Y eso determina que los residentes deban tomar del mismo líquido a donde se vierten todos los desechos”.

Resulta notorio que, al ser este arroyo un afluente del Río de la Plata, terminan volcándose allí los restos sin tratar que vienen de El Gato. Y ABSA tiene a menos de mil metros de la emblemática desembocadura de El Gato, la principal toma de agua de río para potabilizar, que luego reparte a buena parte de la población de la región.

La semana pasada, cuando sus funcionarios leyeron el dictamen de Recondo, desde la Municipalidad de La Plata aseguraron que “ya está el compromiso para instalar una red de contención en la zona de 7 y 515, en Ringuelet”. Ese es sin dudas uno de los lugares puntuales más afectados de todo el cause del morboso riachuelo platense.

Ante la requisitoria periodística, en ABSA aseguraron que no tenían “nada para informar” sobre la causa que busca remediar el daño ambiental que ellos debieron evitar. La impunidad e inoperancia manifiesta con que se manejan esos funcionarios provinciales es llamativa, irritante e irresponsable.

Recondo escribió en su mandamiento judicial, al que tuvo acceso exclusivo el portal nacional de noticias VisionPolitica.info, que las autoridades correspondientes deben "proceder a la instalación de una segunda barrera flotante de contención y extracción de residuos sólidos, en inmediaciones del Complejo Ambiental CEAMSE Ensenada. Ello, a fin de facilitar el retiro de los residuos sólidos del curso hídrico, para lo que deberá garantizarse un sistema de recolección de los mismos, en forma diaria y mecanizada".

Aseguran que el gobierno de PBA deberá “trabajar coordinadamente con las municipalidades de La Plata, Berisso y Ensenada, para concretar un relevamiento de toda la extensión del Arroyo El Gato, el Río Santiago y la cuenca del Río de la Plata (...) a fin de identificar todos los puntos (precisando ubicación) a través de los cuales se produce con habitualidad el vertido de sustancias contaminantes sólidas o líquidas (indicando la naturaleza de las mismas) al curso de agua, a través de actividades antrópicas legítimas o ilegítimas". El informe único deberá ser enviado al juzgado.

Es importante y clarificador consignar que el expediente que tramita en el juzgado de Recondo tiene un antecedente: la “causa Mendoza”, que terminó en la Corte Suprema de Justicia de la Nación y derivó en la creación de la Agencia de Recuperación de la Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR).

Es bien claro que esa instancia habilitó una serie de medidas de remediación, traslado de habitantes que vivían sobre la ribera de esos cauces y varios años de trabajo, para reducir el impacto en una de las zonas más contaminantes del Conurbano: el legendario y nunca bien ponderado Riachuelo. 

Todos ven en La Plata la masacre ambiental que las autoridades ocultan, callan o encubren, en un entramado de inoperancia corrupción y desidia inaceptables. “Esto podría ser la Acumar del sur del GBA”, dijeron recientemente fuentes judiciales al diario Clarín. Se instala entonces la polémica sobre quién es el responsable de esta locura. Funcionarios de la comuna platense aseguran que solicitaron fondos a la Provincia para ejecutar el servicio de limpieza del arroyo, pero el tramite no prosperó.

Los Axel boys dicen que tienen un plan de recuperación de casi 1.000 kilómetros de cursos de agua –incluidos los que están en este fallo judicial- pero por el momento no se ve la concreción. Es importante aclarar que PBA tiene firmados infinidad de convenios con cooperativas de trabajo para obras de mantenimiento de los arroyos, pero nadie aclara quién se debería ocupar (y no lo hace) del peor de todos: el hilo de agua felino e indomable de La Plata.

El juez Recondo aclaró, para finalizar, que "por ahora no se dispusieron medidas punitivas contra las autoridades de los ejecutivos municipales o el Estado provincial. Pero podría ocurrir si las medidas de remediación no se concretan en los plazos previstos”. O sea, si en 60 días no comienzan concretamente la remediación del Arroyo El Gato, la justicia federal podría multar fuertemente a Axel, Garro, Cagliardi y Secco, o a los dos primeros, por lo menos.

Fuentes: LaMovidaPlatense.com VisionPolitica.info, NoticiasEnsenada.info, SolucionesCiudadanas y Clarin.com