Un equipo de científicos de la compañía norteamericana Colossal anunció este lunes que planea la "desextinción" del mamut lanudo de la tundra ártica, desaparecido hace miles de años. Para este proyecto de recreación genética y cuyo objetivo final es combatir el cambio climático, la firma ha recaudado 15 millones de dólares.
p>Al respecto, Info Blanco Sobre Negro consultó al Investigador Principal del CONICET y profesor titular de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Leopoldo Soibelzon, para conocer su opinión al respecto."Estoy completamente en contra, me parece absolutamente inútil y no tiene ningún sentido intentar hacer algo como lo que quieren hacer, es de alguna manera jugar a ser Dios, al creador, y además sin ningún tipo de sentido porque si fuera para encontrar la cura de alguna enfermedad o solucionar el hambre en el mundo, pero implica gastar 15 millones de dólares 'pour la gallery' nomás", opinó el paleontólogo y doctor en Ciencias Naturales.
El objetivo de la investigación, según informó la empresa, es ayudar a combatir el cambio climático ya que estos animales prehistóricos modificados genéticamente podrían "dar nueva vida a las praderas árticas", que según la empresa capturan dióxido de carbono y eliminan metano, dos gases de efecto invernadero.
De todas maneras, el investigador platense señaló que "el cambio climático fue lo que extinguió a los mamuts lanudos y ahora quieren revivirlos para combatirlo, no tiene pies ni cabeza el argumento", y preguntó "¿Cuántos mamuts serían necesarios para que incidan sobre el reservorio de dióxido de carbono?".
"Lo están haciendo porque quieren ver el animal vivo y decir 'nosotros lo logramos y fuimos los primeros'. Por un lado es entendible la vocación del hombre por ir un poco más allá pero por otro lado no le veo ningún sentido a una cosa así", manifestó Soibelzon.
Por otro lado, el investigador señaló que ya no están los predadores naturales, los tallos y las semillas que comían los mamuts lanudos y recalcó que se está trayendo un animal nuevamente a la vida que vivió hace 25 ó 50 mil años y se extinguió hace seis mil, que tenía otros ecosistemas que ya no existen.
"Sería como querer repoblar a la región pampeana con el yaguareté, ¿pero qué comería?, ¿el ganado de los campos? Porque actualmente es todo campo sembrado", planteó el investigador que trabaja en la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la UNLP.
"Me parece que el ser humano ya cometió suficientes errores en el planeta como para además jugar a desextinguir animales", opinó Soibelzon, y agregó que "nunca va a ser un mamut en su totalidad sino que va a ser un elefante asiático al que le implantaron algunos genes de mamut, porque el genoma del mamut no se recuperó completamente sino que se recuperaron fragmentos".
Por esa razón, añadió el profesor de la UNLP, los investigadores necesitan introducirlo en el genoma de otro animal. De esa forma, sería un elefante asiático con fragmentos de un mamut lunado, es decir que quizás logren que tenga pelo largo y orejas chicas "pero en el fondo no es un mamut, es un híbrido que además va a estar sin sus predadores naturales, sin su fauna acompañante, sin la flora que consumía, es más para hacer un parque temático que para otra cosa".
Finalmente, el investigador destacó que "este trabajo de científico no tiene nada porque ante un problema la ciencia lo investiga, genera una hipótesis y la comprueba o no, y esto es un trabajo técnico de ir jugando con cromosomas e ir mezclándolos hasta conseguir algo, pero el método científico es otra cosa".
"Tampoco digo que toda la ciencia tenga que estar aplicada a algo en particular pero sí a generar un conocimiento o a otro tipo de cosas más que a esto, que no me parece que tenga sentido", concluyó Soibelzon. Fuentes: lamovidaplatense.com e infoblancosobrenegro.com