Desde este miércoles, los bolsillos de los bonaerenses sufren un golpe digno de boxeo: ¡las tarifas de ABSA escalan hasta el cielo! La empresa da rienda suelta a un aumento del 200% en el precio del vital líquido y las cloacas, dejando a más de uno con el agua al cuello.
A partir del 1° de mayo (justo en el día del trabajador), las boletas promedian la escalofriante suba de $2.437 por mes. Pero eso no es todo, porque en julio se espera otro aumento del 50%, ¡llegando a un exagerado 350% de aumento en el año!
La decisión, sellada en la Resolución N° 458 del Boletín Oficial, deja a más de 90 localidades bonaerenses en estado de shock económico. El Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos, responsable del sello, aprueba estos valores que, según ABSA, "estarán vigentes desde el primer día del período de facturación posterior al dictado de la resolución".
¿Y cuál es el argumento detrás de este asalto a mano armada? Nada menos que el proceso inflacionario, la devaluación de diciembre y, para rematar, que las tarifas no se han actualizado en año y medio. ¡Una tormenta perfecta para los bolsillos ya vapuleados de los habitantes de la provincia!
Pero esperen, hay más: ABSA asegura que este tarifazo está por debajo de la inflación acumulada desde el Paleolítico. Según la empresa, solo el 26,4% de los usuarios tendrán un aumento menor a $1.000, mientras que un 9,4% se verá agobiado con incrementos de más de $3.000.
En definitiva, con esta medida, la empresa busca dejar a sus usuarios con un nudo en la garganta y el bolsillo en cuarentena. ¿El futuro del agua y las cloacas en la provincia? Una incógnita más grande que el delta del Paraná.