Afirman que la casa era peligrosa por su instalación eléctrica. Los investigadores presumen que una garrafa actuó como lanzallamas y se convirtió en una trampa.

Según informaron fuentes oficiales a 0221.com.ar, dentro de la vivienda, ubicada en calle 9 entre 16 y 18 de Punta Lara, los bomberos encontraron los cuerpos calcinados de las víctimas, entre las cuales se identificaron a cinco menores de edad. 

Tras una denuncia al 911, cinco dotaciones de Bomberos Voluntarios lograron apagar las llamas, pero no lograron rescatar sobrevivientes. Las pericias confirmaron que los fallecidos fueron Camila y Evelyn Cáceres, de 24 y 26 años respectivamente; Sandro Cáceres, de 9 años; Eneas Cáceres, de 7 años; Thiago Cáceres, de 2 años y los mellizos Elena y Ramón Tobes, de 1 año. 

Las primeras pericias indican que el motivo que originó las llamas habría sido un desperfecto eléctrico en una estufa. Al mismo tiempo afirman que los materiales de la casa construida mayormente con madera y chapa, ayudaron a la propagación del fuego.

Elías Cardozo, vecino de la familia que perdió su vida en el trágico incendio, declaró ante los efectivos de la SUB–D.D.I de Ensenada y explicó que se mantuvo despierto hasta las 4 de la madrugada y escuchó a sus vecinos despiertos. El hombre agregó que tiempo después escuchó gritos que provenían de la vivienda, a los cuales restó importancia, debido a que su vecina “siempre estaba gritando, ya que era su forma de ser”.

Con el correr de los minutos, el vecino escuchó explosiones, se asomó y pudo advertir el incendio. Cardozo procedió a llamar al 911 y se dispuso a ayudar a apagar las feroces llamas sin éxito. 

Por su parte, Silvana Florencia Figueroa, una vecina del barrio que también prestó declaración ante el organismo competente, explicó que uno de sus vecinos días anteriores se había hecho presente en la casa donde ocurrió el siniestro y les advirtió que “los cables eran muy finos y debían ser cambiados”.

La vecina también sostiene haber escuchado los gritos provenientes de la vivienda, motivo por el cual realizó otro llamado al 911 y pidió por el arribo de los Bomberos Voluntarios ya que temía que el fuego se extendiese a su propiedad. 

De acuerdo a lo declarado por Figueroa, la DDI de Ensenada procedió a entrevistar al mencionado electricista del barrio. Matías Emanuel Bruzera, de 30 años, refirió que al conocer la instalación eléctrica de la vivienda le recomendó a su dueña cambiarla, ya que la misma era “trifásica y con cables muy delgados”. Bruzera también sostuvo que su vecina no contaba con el dinero necesario para realizar el cambio de instalación. 

Los efectivos policiales lograron establecer que la vivienda de madera estaba calefaccionada con una estufa del tipo a velas eléctricas que se encontraba en la zona del dormitorio. Asimismo, se conoció un dato que ayudó a establecer una teoría sobre el avance de las llamas que destruyeron la vivienda de Ensenada. Abel Comas, bombero de la Unidad Nro. 42 de Bomberos de Punta Lara, sostuvo que en el pasillo de ingreso al dormitorio había una garrafa de la cocina que actuó como si fuera un lanzallamas. 

La hipótesis que se estudia supone que la garrafa en cuestión podría haber quedado abierta y cuando se prendió fuego, actuó como un lanzallamas e impidió que la familia pudiera abandonar la propiedad ya que la ventana del fondo tenía rejas. 

Por el momento, la DDI estableció que las posibles causas del incendio recaen en un accidente fatal, no habiendo encontrado pruebas ni testimonios que indiquen la intervención de terceros en la tragedia fatal que se cobró la vida de una familia de Punta Lara, cinco de ellos menores. 

La causa caratulada como “Averiguación Causales de Muerte-Incendio" quedó bajo la órbita de la U.F.I 1 Departamental, a cargo la doctora Ana María Medina. Fuentes: Lamovidaplatense.info y 0221.com.ar